🥀En el presente libro, encontrarás historias generalizadas del personaje: Keigo Takami.
🥀Historias en donde tú serás partícipe en la vida de este protagonista.
🥀Serán vistos recurrentemente One Shot's para mayor experiencia y entendimiento.
🥀C...
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Keigo permanecía esbozando una sonrisa, con su semblante relajado y suave a la vez. Mientras observaba a su amada acostada en su pecho, amando todos y cada uno de los mechones del cabello esparcidos por el rostro, esas expresiones graciosas y la melodia de su voz que lo hacían volver loco.
-Y así fue mi día, horrible ¿verdad?-Expresabas con la mínima esperanza que Keigo prestara de su atención.-¿Me estás escuchando?-.
-Lo siento, me perdí un momento en tus pequeños ojos-Hablaba con picaresca y tono burlón.-Es que son muy hermosos, es inevitable-.
-Huh, no mientas-Advertías al inflar tus mejillas.
-Pajarito, ¿cómo le mentiré a mi hermosa dama? Eso es imposible-.
Keigo rozaba las yemas de sus dedos por tus mejillas, al observarlas tan bien caía muy en claro que se teñían de carmín con lentitud. Causando así, que elevara las comisuras de sus labios gentilmente al no quitar su vista de ti.
-Quisiera comerte a besos-Agregó el alado con nerviosismo en su interior.-Al carajo, nada ni nadie me impedirá hacerlo. Ni siquiera tú-.
De un momento a otro, visualizabas como giraba de un golpe tu cuerpo, provocando que en esta ocasión, él ya no estuviese debajo de ti. Con ello concluías la ventaja que él tenía al obtener un cuerpo mucho más grande y fuerte que el tuyo.-Aunque realmente, eso no te incomoda en lo absoluto.-Keigo sonreía de manera victoriosa al clavar su mirada en la tuya. Ese brillo en su interior pedía a gritos tratarte como una reina, y lo sabías.
Él procedió a dejar cortos besos en tus labios, uniendo y separando esa distancia una y otra, y otra vez. Viéndolo de tal manera, que pareciera como un juego de niños al besarte de manera repetitiva y tierna.
Keigo llevó un camino de besos a partir de tus labios, dió uno tras otro hasta llegar a las comisuras para quedarse estancado por un breve momento. Provocando que inconscientemente sonrieras en tal acto-Es extraño poder ver a Keigo de manera tan tierna y dulce en momentos así.-Hasta que él le daba continuación al trasladarse a tu mejilla sonrojada.
Besaba repetitivamente sin descanso, haciendo que ese chasquido con el contacto de la piel y sus labios, se pronunciara dentro de la habitación.
-Lo siento, pero tu carita es irresistible-Decía entre dientes al no querer separar sus labios de tu mejilla.
Por inercia, llevaste la palma de tu mano al frotarla contra la cabeza del alado. Sus risos dorados y suaves causaban una total relajación en ti, mientras sólo disfrutabas de las acciones tiernas de él.
-Espera, Keigo. Haces cosquillas-Admitías al sentir ese camino de besos que él dejaba.
-Eso es lo mejor de este pequeño juego-.
-¿Desde hace cuanto tenías pensado en hacer esto?-Reías aún por los movimientos producidos de Keigo.
-Desde que me enamoré de ti, pero nunca me atreví hacerlo hasta ahora-Finalizó al besar tu frente con gentileza.
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Ouh basta, se ve hermoso~✨
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