8: Confesiones Inesperadas

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Matt me lleva caminando hasta quedar frente al río.

El río de noche se ve espectacular, la luna y las luces del puente se reflejan en él, además la brisa nocturna es espectacular.

El castaño se sienta sobre uno de los banquillos que hay frente al río y palmea a su lado invitandome a sentarme junto a él. 

Yo me acerco y me siento, la noche está iluminada por la luna, las estrellas, las farolas y el sonido del río. Odio desde el fondo de mi corazón que esto sea una farsa porque amaría que un hombre fuera tan sencillo y romántico.

Me encanta el agua, verla me da paz. En Australia hay muchas playas y yo amaba ir a la playa, sentarme en la arena con Emi a ver el mar, justo en esos momentos sentía que la vida no era tan mala, y que mis problemas no eran tan graves. Ver el río aquí junto a él, me recuerda un poco a eso.

—Me parece que he elegido bien los lugares de la cita—habla al verme fascinada con la vista, yo asiento con una sonrisa.

—Le atinaste a todo.

—Me alegra, y aun más me alegro verte comer, por un momento tuve miedo que solo comieras la mitad de la pizza.

—Me alimento bien, no soy de las que pasa hambre—el sonríe.

—Eso me gusta—descorcha la botella y me la ofrece.

Yo la tomo sin ningún problema y bebo de ella, antes de pasarsela a él.

—Hablame de ti—pone la botella a un lado—¿tienes mascotas?

—Sí Emi cuenta como una entonces si—me río al recordar lo desastrosa que puede llegar a ser a veces—¿Tu tienes mascotas?

—2 perros, los amo, pero por lo general no llevo a nadie a casa porque no son muy sociables.

—¿Eso debe preocuparme?—el niega—No quiero ser comida para perros.

—No lo serás... ¿Quien es Emi?—me mira intrigado.

—Solo alguien con quien vivo.

—¿Es tu pareja?—de pronto su tono de voz es algo débil.

—¿Crees que estaría aquí teniendo pareja?—el toma la botella y le da un trago.

—Seré honesto contigo—me mira a los ojos—Hoy no fue y primera vez que nos vimos, al menos no de mi parte, te vi hace par de días en el aeropuerto, yo venía de una reunión en Berlín y solo te vi... Arrastrabas tu maleta mientras buscabas a alguien, te veías tan hermosa, que solo me detuve a mirarte y quizás no me lo creas, pero sentí algo inexplicable, algo que me llevaría a hacer cualquier cosa por acercarme a ti, por seguir viéndote, es la primera vez que algo como esto me pasa, estaba muy decidido a hablarte de hecho comencé a seguirte por el aeropuerto y justo cuando iba a hablarte, te vi correr hacia un chica de cabello rojo y ambas se abrazaron, las vi tan cercanas que me desilusione, pense que quizas era tu pareja, supe que no tenía ninguna oportunidad, era imposible que alguien como tú no tuviera ya a alguien, así que solo las seguí viendo, se marcharon juntas, y pensé que nunca volvería a verte, pero resultó ser que hoy cuando fui a la biblioteca para leer un poco e intentar sacarte de mis pensamientos, tu estabas ahí, como obra del destino, en mi biblioteca favorita, sentada en la mesa que usualmente uso, haciendo una de las cosas que mas me gustan en el mundo, leyendo, y estabas tan concentrada que ni notaste mi presencia, tenía que hablarte Milly, tenía que hacerlo o no me lo perdonaría nunca. Y estamos aquí—su historia me ha dejado sin aliento, que podría decir ante eso, la verdad es que hice una pregunta simple, no esperaba esta respuesta—Y seguiré siendo honesto, te he invitado a salir porque quiero una oportunidad, solo quiero que me des una, nunca había sentido una conexión así con ninguna persona—me llevo las manos al pecho, esto tiene que ser una jodida broma, por primera vez en mi trabajo, no tengo un maldito plan.—Yo no voy a decirte ninguna estupidez como que voy a hacer feliz o te voy a dar todo, porque lo que me gusta de ti es que no pareces necesitar de nadie,  no pareces una chica superficial, me encanta que seas tan natural, y es por eso que quiero, y solo te pido la oportunidad de conocernos, quiero ser tu compañero, si tu me lo permites, y si no te gusta la idea, o simplemente estas en una relación con la chica del aeropuerto, solo dímelo y yo entenderé a la perfección. No quiero hacerte perder tu tiempo.

—No esperaba tanta sinceridad—aún estoy perpleja y tratando de asimilar la información—Pero aprecio tu honestidad.

—No tienes darme una respuesta hoy, puedes pensarlo.

—Te lo agradezco—más de lo que se pueda imaginar, porque me ha dejado sin habla.

—Solo dime algo por favor... Tu...

—No pasa nada entre la chica del aeropuerto y yo—le aclaro el tema, en su cara hay una expresión de alivio, tanto así que suelta un suspiro.

—¿Como sabias que te preguntaría eso?—una sonrisa apenada se dibuja en su rostro algo sonrojado.

—Lo imagine—le devuelvo la sonrisa.

—Puedo saber...

—Es mi mejor amiga y mi compañera de piso—enseguida frunce el ceño, al parecer mi respuesta no lo ha dejado satisfecho.

—¿Vives con ella?—Yo asiento—¿Solas las dos?—yo asiento otra vez.

—Si, de hecho es la persona más importante de mi vida, es mi única familia. 

—Entiendo—su expresión se relaja muchísimo al oír eso—Lo tendré en mente.

...

—¿Te volveré a ver?—pregunta Matt mirándome a los ojos, a la entrada de mi edificio, tiene sus manos en mi cintura y yo tengo las mías en su pecho.

Ha sido una noche tan maravillosa que casi olvido que esta es una misión, sus ojos verdes me miran en busca de respuestas, yo pongo una de mis manos en su mejilla, acaricio con mi dedo su piel afeitada y el cierra los ojos ante mi tacto, sus labios están rosados y se que quizás sea el vino que esta causando estas reacciones en mi, pero por primera vez no me molesta el tacto de un hombre, sus manos en mi cintura no me molestan.

Nunca había sentido ganas de besar a un hombre. JAMAS. 

Y aqui estoy, preguntandome ¿Que pasaría si lo beso?.

《Es todo por la misión 》

Es tan extraño, pongo mi otra mano en su mejilla y me estoy acercando lentamente, el abre sus ojos cuando estoy rozando mis labios con lo suyos, y al darse cuenta de mis intenciones solo termina el trabajo, una de sus grandes manos viaja de mi cintura a mi mejilla y cierro los ojos cuando nuestros labios al fin se tocan, esto es una maravilla. 

Sus besos son suaves.

El no lleva el beso al siguiente nivel solo es un beso tierno, dulce y romántico, sus labios saben a vino y a fresas.

No puedo creer que lo haya disfrutado.

—Buenas noches—digo al separarme de el, le doy la espalda estoy por entrar, el me toma la mano para detenerme.

—¿Te volveré a ver?—pregunta por segunda vez y yo estoy decidida a dejarle la intriga, le guiño el ojo y entro al edificio—Tomare eso como un si—grita detrás de mi.

Me quito la ropa al entrar, he llenado el vestido de vino, necesito otro baño y dormir. 

Estoy por entrar a la bañera cuando me llega un mensaje.

De Matt:

"Tus labios son lo mejor que he probado en mi vida"

Wow ¿que respondes a eso? Pienso en el beso y se me eriza la piel, decido responderle algo simple.

Para Matt:

"Me alegra que te gusten, la próxima vez te dejaré probar algo mas" 😏

Siempre es una buena idea dejar a los hombres a la expectativa. En seguida recibo respuesta.

De Matt:

"¿Eso significa que habrá una próxima vez? Estoy ansioso 😬"

¿Ansioso? Pfff...

Para Matt:

"Descansa Matt"

Asesina de Hombres || Matt Smith & Milly AlcockМесто, где живут истории. Откройте их для себя