27| La verdad... ¿te duele?

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Resumen capítulo 26:

-Alik se entera que lo mafiosos estarán en Moscú y planea viajar hasta allá.
-Alik encuentra a Edik y a Nadine en el fruti fantástico. 😏
-Darihan ve a Alik con otra en un restaurante y siente ¿celos?
-Edik se da cuenta de lo que hizo Darihan en la misión de Mónaco y la encara. 
-Darihan escucha la conversación de Edik y Alik sobre una tal Mila.
-Estando en Moscú sus hermanos le hacen una mala jugada para que finalmente se quede a dormir en casa de su madre.

Ahora si, ¿ready? Pues a leer

Seré la luz en tu obscuridad,
así yo me quede sin luz. ✨🖤-Lali

Darihan R. 🥀

No puedo describir la magnitud de la tensión qué hay en el lugar. Alik está furioso, Edik completamente serio y desconcertado, Karol se muestra divertido aunque lo más acertado es que parece incómodo y Luka, bueno... él parece disfrutarlo.

Ansiosa tamborileo los dedos en mi pierna, intentando distraerme de todo esto que está pasando, porque no estoy entendiendo nada.

Los gritos, gruñidos y amenazas fueron temibles... sé que Alik se contuvo, pero casi estaba segura de que él quería asesinarlos, no sé qué habían hecho, pero ya no estábamos en el hotel, ahora estábamos pasando los portones de una enorme mansión de lujo.

Se estacionan y nos abren las puertas, enseguida bajo girando embelesada con todo a mi alrededor, la fuente en medio y las grandes escaleras.

Trago saliva nerviosa y no entiendo porque, nadie dice ninguna palabra, lo único que se escucha es como los trabajadores comienzan a subir las maletas y yo veo de uno a otro. Ninguno se mueve y no se con certeza que están esperando.

Karol y Luka se miran con labios firmes como si supiesen qué pasa. Ellos son los primeros en emprender camino, y subir las escaleras con lentitud. Yo por el contrario miro de reojo como Edik se acerca a Alik le susurra un par de cosas para dejar una palmadita en el hombro de este y marcharse por el mismo camino que los demás.

Su rostro es imperturbable, sus manos están en los bolsillos y no despega la mirada de las escaleras.

Me acerco lentamente posicionándome a su lado.

—¿No piensas entrar?

Sus ojos jamás dejan el frente.

—¿No piensas entrar tú?

—Es tu casa, sería extraño que entrara primero cuando tú no lo has hecho.

Me cruzo de brazos mirando al mismo sitio que él.

—Esa no es mi casa —suelta con frialdad—. Ya no.

—¿Tienes miedo? —cuestiono de la nada. Siento qué hay una parte que es así.

Sus ojos automáticamente me miran.

—¿Tú?

—¿Por qué lo tendría? —susurro confundida.

—Exacto, ¿por qué tendría miedo?

La burla tiñe su voz.

—Entonces, ¿por qué no entras?

Resopla y se gira, al parecer ya con algo de impaciencia.

—Porque no quiero estar aquí. Odio esta casa, odio este lugar y no es de tu incumbencia Darihan, solo entra.  —su voz se escucha alterada.

Lo miró fijamente.

—Entonces vámonos —le propongo sintiendo la adrenalina apoderarse de mi cuerpo—. Supongo que habrá más hoteles.

Lienzo Ruso +18 © |Actualizándose lentamente|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora