"Lo mejor para el mejor."

Día 19: Colmillos | "Pepperony."

Pepper no iba a mentirse, Strange era un alfa apuesto, elocuente y con un sentido del humor ácido, por ello entendía que a Tony le agradara.

Ella había observado cómo el ex-cirujano de hecho, trató de mantenerse lejos para luego, fallar estrepitosamente pues de una u otra forma siempre terminaba atraído a orbitar alrededor de su omega pero, ¿quien no lo hacía?

Tony era la persona más amable, divertida, inteligente y bondadosa, además de malditamente sexy, que existía. La pelirroja lo entendía y lo amaba tal cual era, sin embargo había ocasiones cuando personas cómo Stephen aparecían en sus vidas a las cuales decidía no perder de vista en ningún momento.

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Uno de esos tantos días normales, encontró a Tony en su laboratorio, con el cabello revuelto, aceite en el rostro y un hechicero sonriente a su lado. No le agrado mucho la escena, sin embargo ella siempre era cortés con el hombre.

Podria estar algo celosa pero ella siempre sabía lidiar con esos sentimientos.

—¡Pep! — le saludo su omega mientras terminaba aquel emocionante proyecto dónde magia y ciencia se unirían en un traje de nanopartículas. —Casi terminamos, Houdini es un genio casi tan genial cómo yo.

—Me alegra escuchar eso. — se acercó donde su castaño a darle un beso que le robó el aliento a los tres ahí presentes. —Esperaré entonces para que vayamos a comer. — observó al otro con una sonrisa en el rostro enseñando sus comillos. —Estás invitado a acompañarnos Stephen.

—Gracias pero no, he descuidado mis obligaciones y tengo que desistir. — se observaron fijamente. —Aunque preferiría seguir aquí, hay cosas que no están escritas a pasar.

Tony ajeno a la situación, no notó la charla entre líneas entre los alfas.

—Entonces será luego Dumbledore. — el omega despidió a su amigo mientras atravesaba un portal.

Si, sería luego y Pepper seguiría atenta a ello.