Karate Kid (Johnny Lawrence y tú)

Capítulo 2

El sonido se acerca cada vez más a mí hasta que unas cuantas motos pasan a mi lado a toda leche, y demasiado cerca de la acera y de mí.

-¡Hey, que casi te subes a la acera idiota!- todos tienen chaquetas rojas con un logo de una cobra en la parte de atrás.

Cuando las motos se paran un poco más adelante que yo, me paro inmediatamente. Quiero correr, pero mis pies se han anclado al suelo.

-Gritar de esa manera no va a hacer que vayamos más lentos- dice un chico rubio acercándose a donde estoy con su moto, el resto le sigue. Cuando se posiciona a mí lado en la carretera, no puedo evitar pensar que es muy guapo, seguramente tenga mi edad o la de mi hermano.

-Casi te subes a la acera- le digo de nuevo, en un tono mucho más bajo.

-¿Y?

-Que casi me atropellas- me quejo, está vez sonando más segura. Ellos se empiezan a reír.

-Lo tendré en cuenta la próxima vez- es lo último que dice antes de irse con sus amigos riéndose de fondo. Les pongo mala cara y me doy la vuelta para volver a casa.

Entro y 5 minutos después, entra Dani.

-El manitas es un hombre muy raro, no sé cuándo vendrá a arreglar el grifo, supongo que cuando tenga tiempo

-¿Un hombre raro?- pregunto cogiendo una revista de la mesa.

-Sí, estaba intentando coger una mosca con dos palillos chinos- frunzo el ceño asombrada, decido no hacer más preguntas.

Al día siguiente salgo antes que Dani para llegar a la playa antes que él y Freddy. Me siento en la arena sola, viendo el precioso mar que tengo delante, unos chicos juegan al fútbol cerca. La verdad es que es triste pensar que el verano se va a acabar.

-Hola- dice una chica rubia de un grupo de chicas que están sentadas cerca de mí.

-Hola- digo algo tímida.

-¿Cómo te llamas?

-Amy

-Encantada, soy Ali. ¿Estás sola?

-Sí, bueno estoy esperando a alguien

-Tienes pinta de ser nueva, nunca te había visto por aquí

-Sí, vengo de Nueva Jersey, me mudé ayer

-Wow, un sitio muy curioso. ¿Quieres sentarte con nosotras?

-Oh, claro, me encantaría- el primer paso para conocer a gente nueva es ser sociable, así que tengo que hacer mi mejor esfuerzo.

Me levanto de la arena y sigo a Ali hasta su grupo de amigas, me las presenta y en seguida hacemos buenas migas.

-Buh- alguien me asusta por la espalda, doy un gritito y me doy la vuelta, dándome cuenta de que es mi estúpido hermano.

-No vuelvas a darme ese susto, idiota- digo con la mano en el corazón, él se ríe y las chicas no dejan de mirarle.

-Voy a jugar al fútbol con ellos, no te muevas sin avisarme- dice poniendo sus manos en mis hombros desde atrás y dándome un beso en la mejilla, asiento y se va con ellos.

-¿Quién es él?- pregunta Ali.

-Se llama Daniel

-Oh. ¿Conoces a gente de aquí?

-No, él ha venido conmigo desde Nueva Jersey

-Ohhh- asiente entendiendo y los chicos se acercan mucho a nosotros mientras juegan, Dani le da una patada a la pelota adrede para que venga directamente a mí.

-Daniel- le regaño riendo, ya que me ha llenado un poco de arena. Mi hermano se queda embobado mirando a Ali, y claramente todos lo notamos. Sus amigos le llaman para seguir jugando y las chicas se levantan.

-¿Queréis ir a daros un baño?- pregunta Susan.

-Prefiero quedarme aquí- respondo en seguida, no me gusta el mar.

-¿Por qué?- pregunta Bárbara.

-Porque no sé nadar- miento, volviendo a recordar mi pasado. ¿Por qué el pasado siempre tiene que volver?

-Solo vamos a la orilla, no nos vamos a meter- aclara Ali alargando su mano hacia mí, me levanto con su ayuda y vamos a la orilla, ellas meten los pies en el agua pero yo no.

-Cómo te miraba ese tal Daniel- dice Susan pícara, las demás reímos y Ali me mira angustiada.

-Espero que no te moleste- frunzo el ceño confusa.

-¿Por qué iba a molestarme?

-Por si te gusta o es tu novio, no quiero meterme- ahora sí que me río a carcajadas.

-Perdón- me disculpo cuando me calmo, por reírme se esa manera, al menos ellas también se han reído- ¿Dani y yo novios? Por dios no

-¿Estás segura?- pregunta Ali.

-Ali, Dani es mi hermano mayor- respondo, a la pobre se la queda una cara que poco más y parece un tomate. Tengo que decirla una y otra vez que no se preocupe, ya que ha sido mi culpa por no aclarar en ningún momento que Dani es mi hermano, además que no la juzgo, ya que no nos parecemos mucho.

Cuando veo a los chicos hacer un descanso, me acerco a Dani y todos ellos me miran.

-Hola- le digo, él se da la vuelta y me sonríe.

-Hola

-Te ha gustado cierta rubia, ¿eh?- pregunto dándome la vuelta para mirarla, está a lo suyo con sus amigas.

-¿Qué? Naah, pero por curiosidad. ¿Quién es?- me río ante su pregunta.

-Ali Mills, vive en Encino, un lugar demasiado lejos de nuestro alcance, es un barrio de clase alta, que tiene dinero

-Me alegra ver que te has llevado bien con ellas

-Sí, pero no va a durar- le aseguro.

-¿Y tú qué sabes? No todo el mundo es igual

-Hey Dani. ¿Eres nuevo y ya estás ligando?- le dice uno de los chicos para molestarle.

-Es su hermana, idiota- aclara Freddy, me mira y me sonríe- Hola Amy

-Hola Freddy- le saludo de la misma forma- ¿Por qué todo el mundo se piensa que soy tu novia? Iugh

-¡Oye!- se queja Dani dándome un puñetazo en el hombro de broma.

-Voy a volver con ellas antes de que me vuelvan a confundir- digo medio riendo.

-Mejor- dice Dani- Hablamos después

-Adiós Amy- dice Freddy sonriendo de nuevo, despidiéndose con la mano.

-Adiós Freddy, adiós chicos- les digo al resto para que no se sientan ignorados, ellos sacuden sus manos en el aire de una manera un tanto extraña, con demasiado entusiasmo y unas sonrisas raras y enormes.