𝐀𝐩𝐫𝐞𝐧𝐝𝐢𝐞𝐧𝐝𝐨 𝐚 𝐀𝐦𝐚𝐫

Capitulo 18

Un sollozo salió de su boca mientras sostenía el teléfono. Al otro lado Héctor sonreía, había funcionado su plan.

H: Bea, cariño tranquila.... ¿escúchame si? -dijo mientras un placer recorría su cuerpo-

B: Todo.... to... todo está mal aquí. Hip... yo... me voy a regresar a Cartagena. -soltó- en la madrugada.

H: ¿Quieres que te pida un pasaje Bea? -pregunto con excitación.- ¡Puedo ir por ti si lo deseas! -Cambio el tono de voz por uno meloso-

B: No tranquilo... -mencionó sorbiendo su nariz- Yo iré... me gustaría, si tú. -dijo cortando la voz nuevamente- tu me esperas en mi casa... por favor, solo no quiero que me dejes.

H: Jamás te dejaría hermosa. -mencionó meloso- yo esperaré aquí si... solo dime a qué hora llegará tu vuelo.

B: Ehhhh.... mi vuelo sale a las 3 de la mañana. -mintió-

H: Perfecto.... mira, me quedare en tu casa vale. Y.... y luego, te haré el desayuno así me cuentas que pasa.

B: Me parece estupendo.... "te necesito tanto" -mencionó- eres lo último que me queda.

H: Shhhh.... tranquila mi Bea, conmigo estarás siempre segura. Cuidaré de ti siempre.

B: Y yo.... -mencionó mientras recordaba el maletín- Yo protegeré tu vida Héctor... de eso, puedes estar seguro.

Betty colgó, simplemente quemaba hablar con el. No podía, abrió la puerta del carro y vomito, así de asco pudo llegar a tenerle a alguien pensó. Se limpió con agua de una botella y salió del carro. Necesitaba fuerzas, y Armando era su todo. Quería despedirse con suerte estaba dormido.

Discretamente entro al hospital donde la recepcionista sonrió al verla, le pregunto si alguien se encontraba con el y ella le informó que no. Así que pidiendo autorización entro un ratito.

Abrió con cuidado la puerta y ahí estaba, dormido. O eso creyó ella, así que despacio se acercó y le comenzó a hablar mientras se sentaba a un costado de la cama.

B: Hola, -saludó dulcemente- mi amor espero que te recuperes pronto. -dijo mientras acariciaba su cabeza con el vendaje- Tengo que irme, y se que me costará estar sin ti, pero haré todo lo posible para resolver esto vale, se que.... te lastime -sollozo- y espero que me perdones.

Betty cerró los ojos un momento, y se volteó. Armando despertó, y la vio ahí, Justo cuando ella volteó el cerró sus ojos y se hizo el dormido.

B: Yo se que en este momento te estoy haciendo mucho daño. -dijo tomando su mano- Pero te haré más daño si sigo aquí junto a ti, descubrí una verdad, y si no lo resuelvo vendrán por ti. Y no quiero, eres tan Bueno, no te importa complacer a nadie con cualquier cosa, y eres una de las mejores personas que he conocido y que amare profundamente. -hizo una pausa- Pero antes de irme, necesito contarte todo.

En ese momento Armando estuvo tentando en abrir sus ojos. Sentía curiosidad pero también sabía que la podía asustar si lo miraba despierto. Así que aguantando sus ganas de hablar se quedó quieto. Esperando a que continuase.

B: Yo vine a Bogota a trabajar, al principio lo vi como una forma de escapar de todo lo que viví en Cartagena, pero no podía engañarme, de alguna forma quería volver a vivir. Y me aterró la idea de vegetar en Cartagena. Y tenía miedo, hasta que te conocí. -sonrío quedito- en ese momento Armando, sentí sensaciones tan bonitas, que me sorprendió. -sonrío recordando todo- y reflexione, me gusto la idea de tenerte en mi vida, como amigos pensaba aún y cuando me preguntaste mi pasado me asusté y mentí, pero me hubiese encantando decirte que era tu guardaespaldas. -soltó su mano, y camino hacia la ventana-