Ambos guardaban un secreto, pero ninguno quería revelar los suyos, pero siempre hay alguien que se doblega por el otro ¿No?
Ella desde de salir de un internado siquiátrico decidí mudarse con su primo para así empezar de cero y tratar de mejorar.
_
...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
—Termine, gracias—agradezco, pero mi tía Jane me detiene.
—Amelia, no terminaste de comer, termínalo todo—me regaña yo solo le doy una sonrisa fingida. Realmente quiero levantarme de esta mesa.
—En verdad ya estoy satisfecha—con lo que hablo de mi familia me quito todo el apetito.
—De acuerdo—me da una sonrisa cálida y siento como mi corazón se hace pequeño, porque mi madre jamás pudo ser así conmigo, pero no puedo hacer nada que soporta está actitud porque después de todo tengo una persona que me ama como una hija propia así que mientras ella esté acá yo estaré bien.
Me retiro de la mesa, pero antes noté una mirada penetrante sobre mí.
Volteo rápidamente y veo a Dante mirándome fijamente, él se percató de mi mirada a lo cual solo giro con nerviosismo.
Tal vez después de todo él no tenga nada bueno con ella, pero es su propia elección.
—Vienes Amelia—consulto Mateo.
—Sí, solo quiero ir al baño un momento.
—De acuerdo, pero estaré midiendo tu tiempo—lo se suena extraño que él mida mi tiempo en el baño solo que tuve un pequeño accidente en el baño y desde ese día Mateo mide mi tiempo en el baño a demás tía Jane lo obligó hacerlo al principio y ahora a él se le quedó de costumbre.
—Me asfixia, Mateo—expreso con un toque de incomodidad.
Él pone los ojos en blanco y yo entró al baño.
Me voy al lavamanos y me miró al espejo, debo dejarlo escapar antes que pase en público.
Siento como las lágrimas empieza a salir de mis ojos y me tomo del pecho.
Porque me pasa esto a mí ella es mi madre se supone que me debe querer, pero desde el día que nací recibido el rechazo de mis dos padres.
Mi corazón duele...
Trato de dar lo mejor de mí, pero ellos no lo notan así que deje de hacerlo jamás salgo de casa solo vengo a ver a Mateo nada más, no tengo ningún tipo de amistad con nadie porque jamás salí de casa y en la escuela para todos soy rara.
Tal vez soy muy tonta no soy alguien tan inteligente, pero doy lo mejor de mí, pero creo que estoy muy cansada para seguir haciendo eso.
Fue una tortura verme al espejo y ver algo que no me gusta siempre vía a las demás chicas y me comparaba con ellas y me di cuenta de que yo no era ni la mitad de bonita, solo soy algo común y fácil de encontrar.
No saben que se siente sentirte impotente por no agradarles a tus padres, tal vez debí ser más bonita o inteligente, pero desgraciadamente no lo soy ellos lograron destruirme al punto que ya no sé quién soy solo sé que he estado viviendo en la oscuridad desde que solo soy una niña.
