Capítulo 23~Piel

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Maratón 2/3

El siguiente capítulo contiene escenas para mayores de 18, leer bajo vuestra responsabilidad.

La maravillosa sensación de sus labios húmedos colisionado y degustándose comenzó a saber a poco cuando Jimin se movió por instinto y se instaló entre las piernas del mayor

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La maravillosa sensación de sus labios húmedos colisionado y degustándose comenzó a saber a poco cuando Jimin se movió por instinto y se instaló entre las piernas del mayor. Sus lenguas salieron a la vez para encontrarse a mitad de camino en el mismo instante en que sus entrepiernas rozaron sobre la tela de sus pantalones de pijama. La tela era tan fina y delegada que, más años de contención física y relación nula entre ellos, rápidamente sus penes se endurecieron creando erecciones.

Jimin mordió su labio inferior y TaeHyung gimió cuando las caderas de menor bajaron más llegando a golpear con su erección su trasero. Un chorro de lubricante salió de su ano y le hizo volver a gemir mientras arqueaba su espalda. Los labios del rubio bajaron a morder y succionar su cuello con fuerza que posiblemente dejaría morados en la piel canela.

-Tae. -Gruñó el Beta en su oído con la voz increíblemente ronca a comparación del tono dulce que siempre lo caracterizaba. -¿Me dejas tocarte un poquito? -El Omega asintió frenético y lo miró a los ojos cuando sostuvo su rostro con sus manos.

-Por favor Beta. -Dijo antes de tirar de él a un nuevo beso más alocado y descoordinado.

Jimin mantuvo su peso con uno de sus brazos y con su mano libre bajó el pantalón de pijama del mayor hasta mitad de sus muslos para después unirse entre estos tocando la zona caliente de piel suave.

-Adoro tu piel. -Habló de forma torpe entre el beso que dejó dominara el Omega. -Algún día voy a hundir mi cara aquí y te voy a hacer temblar mucho más que ahora.

Con esa declaración TaeHyung supo varias cosas claras; Jimin en definitiva era un pervertido adorable, realmente estaba temblando por la excitación y necesitaba que Jimin cumpliera esa "amenaza".

Los dedos pequeños del Beta hicieron presión entre las mejillas de su trasero y se impregnaron de lubricante con facilidad ante una nueva oleada de placer y el escupir más de este por ende. Jimin se alejó de su cuerpo solo lo justo y necesario para poder observar, con los ojos encendidos en deseo, como su dedo medio se introducía en esa fruncida y rosada entrada virginal.

-¡Ah~! -Gimió alto TaeHyung volviendo a arquear su espalda. El Beta se sorprendió por lo receptivo que estaba, eso le encantó, así que comenzó a mover su dedo en su interior de forma circular, saliendo y entrando, manteniéndolo mientras lo doblaba en su interior y acallando sus gemidos con un nuevo beso que el pobre Kim no podía devolver.

Fue en ese instante que un peso nuevo se instaló en la cama junto a ellos y los hizo separarse, JungKook estaba allí.

TaeHyung tembló y sollozó porque Jimin se había detenido y por la mirada de lobo hambriento de su Alfa sobre su intimidad.

-¿Estabais jugando sin mí? -Preguntó con atisbos del poder de un Alfa en él, Jimin se quedó callado tan solo siendo capaz de gruñir deseando escuchar más de la voz del peliazul. TaeHyung asintió señalando a Jimin como único culpable. JungKook rio ronco. -A ver que ayude a Beta con nuestro Omega. -JungKook se inclinó y besó débilmente los labios maltratados, hinchados, rojos y llenos de saliva de TaeHyung antes de dirigirse a su Beta y morder el lóbulo de si oreja. -Los dos juntos cariño.

La pequeña mano de Jimin fue sujeta por la más grande y tatuada de JungKook, rodeándola por completo. Obligó a su dedo a salir del Omega y después colocó también su dedo corazón recto junto al más pequeño y rechoncho de Jimin. A la par, sin contemplaciones, introdujo ambos dedos en TaeHyung que volvió a gemir alto por el placer mientras tapaba su boca con sus manos y de sus ojos caían lágrimas de placer.

Ni si Beta ni su Alfa estaban siendo gentiles a la hora de golpear en su interior y tampoco se quedaron con las ganas de subir su camiseta y trepar por su pecho hasta atrapar cada uno de ellos uno de sus pezones color canela entre sus labios y dientes.

Al cabo de unos minutos, el fuerte nudo de nervios se formó en su vientre bajo y se corrió blanquecino y medio trasparente sobre su vientre y parte de los pechos enfundados aún en camisetas de los contrarios. JungKook dejó el pezón tirando de él con sus dientes para ver como Jimin soltaba el que él comía con delicadeza para luego soplar en él y provocar un delicioso escalofrío en TaeHyung.

JungKook tiró de la mano de Jimin que aún sujetaba y que, juntas, aún tenían sus dedos corazones en el interior apretado y mojado del Omega. El Alfa saltó sobre el cuerpo de TaeHyung, llegando al lado de Jimin para ser el que ahora era sometido sobre un cuerpo más fuerte y excitado.

TaeHyung, retirando las lágrimas de sus ojos con el dorso de sus manos, dobló el rostro para ver a sus destinados. Jimin estaba con la boca abierta jadeando, las mejillas rojas y el cuello expuesto mientras JungKook masturbaba sus ambos penes juntos y a la vez con una de sus manos, justo la que estaba impregnada de su lubricante.

El Omega, aún si estaba cansado y sin sofocado, se acercó para besar el cuello expuesto del Beta. Sus dientes rodeando la nuez de Adán y una de sus manos yendo a simplemente pasar las yemas de sus dedos por las cabezas de los ambos pones masturbados y unidos por la gran mano de Jeon.

El semen espeso de ambos salió en tiran de intervalos que mancharon más sus camisetas, las sábanas, la mano de JungKook y la de TaeHyung; incluso un poco cayó en el pelo de JungKook y, sinceramente, no pudo importarle menos.

Llevaban tanto tiempo ansiando el mínimo encuentro físico entre ellos, que les había sobrepasado casa sensación. Si así era tocarse, cómo sería el sexo.

-Esto... -La voz algo rota, acompañada de la respiración acelerada, de Jimin hizo a los contrarios verle. -¿Esto te ha relajado? -Preguntó a TaeHyung quién asintió somnoliento. -¿Y a ti? -Preguntó a JungKook quien también asintió quitándose la camiseta para limpiar su cabello y su mano. -Entonces vamos a dormir.

-No podemos ir a dormir así. -Se quejó el Omega siendo justo el que más parecía agotado. Jimin se quitó también su camiseta y la pasó sin vergüenza por la entrepierna del pelinegro.

-Minnie tiene razón cariño. -Habló JungKook limpiando sus mano y arreglando sus pantalones en su lugar. -Mañana lavando las sábanas y nos duchamos, aprovechemos el estar descargados ahora.

-Me siento un cochino, pero vale. -Accedió haciéndose hueco bajo el brazo de Jimin y apoyando su rostro en su pecho aún acelerado. -Tu corazón hace pum pum pum... -Dijo de forma dulce varias veces hasta que cayó dormido, JungKook tomó lugar al otro lado de Jimin y apagó la luz de la habitación para abrazar como pudo a sus ambos destinados contra sí.

-Buenas noches Minnie. -Susurró sobre si oído, este rio antes de responder.

-Buenas noches Kookie.

🍃🍵🌼

Nota: La tensión sexual reprimida de tantos años es brutal men 😳

Nuestro Trabajo es estar contigo ~ VKookMin ~ JungKook, Jimin y TaeHyungWhere stories live. Discover now