Jeon JungKook es un chico adorado, impaciente, competitivo y ciertamente chulesco, pero un Alfa adorado y apreciado.
Kim TaeHyung es un chico brillante, divertido, alegre y demasiado tierno, pero un Omega brillante y apreciado.
Park Jimin es un chic...
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El lobo Beta y enfermo de Jimin se removía con ansiedad en su pecho, unas enormes ganas de vomitar lo zarandearon y sus manos se alejaron del tacto de SeongHwa para buscar firmeza en la que JungKook reposaba sobre su muslo y las que TaeHyung tenía enredadas en su vientre. Los ojos del rubio se cerraron con fuerza y comenzó a respirar profundo pero relajado a la vez.
Era demasiado para procesar en tan poco tiempo. Su lobo estaba moribundo por si culpa, adicto a unas pastillas porque él se las había estado proporcionando fuente años. A su vez, él no era el cumple de ellos, sino su madre quién le odiaba y culpaba de cosas que estaban a su alcance y razón.
Y ahí estaba lo que sinceramente más le preocupaba y más dolía, su padre, el único ser humano que a su modo lo había cuidado y protegido, no era su padre. SeongHwa era su tío y su padre había muerto el mismo día que debía ser el más feliz de su vida porque él llegaba a ella.
-No sé que decir. -Murmuró finalmente. -No puedo pensar.
-Jimin. -Le llamó SeongHwa acercándose más a él, apartando el flequillo rubio de sus ojos cerrados. -Soy un padre serio y distante, pero te quiero y me preocupo por ti. -Con curatela, de ser analizado cada uno de sus movimientos por los destinados de su hijo y miedo de asustarlo al mismo, se acercó hasta dejar reposar su frente en la del menor. -Vamos a alejarnos de tu madre y buscar ayuda para tu lobo hasta que esté sano del todo. Prometo aprender a escucharte y saber que quieres y te hace feliz, pero no adelantes tu vida. -Prometió y pidió sintiendo la respiración de su hijo relajarse. -Podemos ir paso a paso, aún cuentas conmigo. Siempre has contado conmigo hijo.
Aquello era cierto, no había situación más verifica que que Park SeongHwa, era, es y será el padre de Park Jimin.
-Entiendo lo que quieres decir. -Susurró abriendo al fin sus ojos, haciendo una promesa silenciosa con su padre al conectar sus miradas.
-¿Minnie? -Preguntó TaeHyung a su espalda, con su lobo alterado sin comprender su motivo del todo. El Beta se alejó de su padre y se giró para encarar a su Omega.
-Tae, tú quieres aprender y llevar el negocio de tus padres mientras estudias fotografía. -El Omega ya había comenzado a llorar de nuevo. -Kookie, tú empiezas la universidad en un mes. -Dijo entonces viendo al Alfa. -No puedo parar vuestra vida haciendo que huyamos cuando encima tenéis a vuestra familia y yo no estoy bien. -JungKook movió su cabeza con fuerza, negándose a esa idea que Jimin estaba proponiendo. -Yo también tengo que cuidarme y conocerme.
-Pero, ¿qué pasará con nosotros? -Preguntó dolido TaeHyung, buscando el aroma a té en su Beta con ansiedad.
-Seguiremos juntos y volveremos a vernos cuando yo esté sano por dentro y por fuera. -Sonrió, a pesar de las lágrimas amontonadas en sus ojos y su aspecto moribundo y enfermo, Jimin sonrió iluminando los corazones humanos y almas lobunas de sus destinados.
