💥 l ¡¿ᴜɴ ʙᴇʙᴇ́?́! l [ᴋᴀᴄᴄʜᴀᴋᴏ]💥

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¡ADVERTENCIA!

Primero: soy inexperta en esto de el "lemmon" asique pido perdón de antemano :')

Segundo: contenido sexual (+18) si eres menor de edad, leelo bajo tu propia responsabilidad.

Tercero: Es larguísimo este capítulo...creo xd.

Cuarto: Lo escribí media dormida asique si encuentran errores, no duden en hacermelo saber.

Quinto: Déjame tu opinión en los comentarios :v

Capítulo treinta y uno.

"Carajo"

La tarde no había tardado en llegar y cierto pareja parecía estar demasiado ocupada en el silencio. Ambos estaban sentados en uno de los sillones mientras permanecían cruzados de brazo sin decir absolutamente nada.

Al parecer el hecho de aver dejado ir a la bebé había recién afectado sus sentimientos, en especial para la castaña, aunque anteriormente lo había sufrido más pero aún no lograba procesar el hecho de no volver a verle.

— Oye bakugou.— le llamó susurrante.

—¿mnh?— emitió fijando su vista en ella.

—¿Crees que ella-

—Si. Ella estará bien, no te preocupes, ese par de vejestorios no parecían ser tan inútiles.— le interrumpió acompañado de un suspiro, —¿Alguna otra duda?

La castaña sonrió para si misma ante sus palabras.

—No, ninguna.— respondió acurrucandose a su lado, —Abrazame.

El cenizo bufo antes de rodearla con ambos brazos hasta apretarla contra su pecho, —Supongo que esta vez te consentire un poco, —añadió con una divertida sonrisa.

—¿Es así?— inquirió pícara mientras alzaba una de sus cejas, —¿Me consentiras?

—Tsk...— chasquio la lengua un tanto avergonzado, —Si me sigues mirando así, te explotare de la forma más desesperante.— amenzado.

—Uy quiero ver cómo lo intentas, katsuki- kuun~ —canturreo su nombre sonriente.

El cenizo sin dejar que lograse ver sus mejillas totalmente ruborizadas, se avalanzo sobre ella y empezó a hacerle cosquillas por todos lados.

—Ba-Bastaa jajaja.— exclamó entre risas, —Demasiadas cosquillas jajahha.

El cenizo no tardó en reír junto a ella mientras se dedicaba a torurarla la mayor parte posible hasta ser víctima de el quirk de la castaña, quién le hizo flotar hasta llegar a la lámpara.

—El qué ríe último, ríe mejor.—añadió con satisfacción.

El cenizo chasquio la lengua antes de dejarse llevar por la gravedad hasta caer en cuenta que flotaba boca abajo   sobre la cabeza de la castaña quién con ambas manos le atrajo hasta estar a escasos centímetros de su rostro.

—Parecemos spiderman y merry jane cuando se encontraron en el callejón mientras llovía a cantaros.— comentó con una amplia sonrisa en sus labios la castaña.

—Pero falta una cosa.— comentó desviando su vista a sus labios, —¿Sabes que es cara redonda?

—mm..tal vez sepa al respecto..—murmuró mirando sus labios de la misma forma, —Y creo poder hacerlo, —Susurró antes de juntar sus labios con los de el cenizo, quién no tardó en corresponder con lentitud mientras intentaba mantenerse en un solo lugar, aún cuándo la castaña lo sostenía.