Gemelos Macallister [ACTUALIZANDO] +18

| Capítulo 2 |

GISELLE

Me sacudí al son de la música, solo moviendo la mitad de mi cuerpo ya que me encontraba sentada. Sacudí mi cabeza de un lado a otro, permitiendo que mi cabello golpeara mi rostro varias veces.

—Yo nunca he vuelto con mi ex —dijo la chica teñida de azul.

Nunca había tenido ex, por lo tanto, nunca había vuelto con uno. Dejé mi trago intacto mientras más de la mitad del círculo se lo bebió, incluyendo al moreno a mi lado que no dejaba de coquetear conmigo. El nuevo juego comenzó a aburrirme, ya que no había hecho la mayoría de las cosas que se mencionaban.

Verdad o reto había quedado atrás, ahora, jugábamos el clásico "Yo nunca". Las reglas eran simples: en orden cada persona decía algo que nunca había hecho, y como castigo las personas que sí, bebían un trago.

—¿Quieres irte ya? —Jason volvió a preguntar detrás de mí, como si no le hubiera respondido "no" hace un minuto.

Negué con la cabeza exageradamente, tan rápido que sufrí de un leve mareo al detenerme. Su plan inicial era que disfrazara el tequila con agua, pero rápidamente el círculo estuvo en desacuerdo alegando que esas no eran las reglas del juego. Acepté beber algunos tragos y le prometí a Jason que me contendría. Sin embargo, después de un corto tiempo, la necesidad de olvidar unos hermosos ojos esmeralda se apoderó de mí y la solución más fácil que se me ocurrió fue ahogarme en alcohol. Aunque solo había tomado tres tragos, ya podía sentir sus efectos.

—Únete a nosotros en vez de vigilarme —le dije mientras agarraba su brazo y lo sacudía un poco—. No tienes que dejar de beber para cuidarme, ¿no quieres divertirte también?

Jason soltó un suspiro y negó con la cabeza en silencio, aunque no hizo ningún comentario, sabía exactamente lo que estaba pensando. Él conocía bien mi poca tolerancia al alcohol y mi extraño síntoma que aparecía algún tiempo después de consumirlo, sin embargo, ya habían pasado varias horas desde que había iniciado a beber y no me había ocurrido nada. El pensamiento de que había superado el síntoma se asomó en mi cabeza, pero no se lo mencioné, ya que, aunque lo hiciera, no iba a beber conmigo o dejar de preocuparse.

—Mañana tienes un vuelo, será mejor que nos vayamos.

—¿Ahora si te importa? —Solté un bufido exagerado.

—Tu padre me va a matar.

—Debiste pensarlo antes.

Sentí su mirada muy fijamente en mi espalda y un aire tenso. Se había quedado en silencio, y eso solo significaba peligro. Como lo imaginé, su voz llegó seria a mi oído.

—¿Ocurrió algo? —me interrogó después de un tiempo—. Antes de que te encontráramos.

Mi cuerpo se puso rígido inconscientemente. No quería mencionárselo, no quería pensar más en que no lo volvería a ver. Si tan solo se me ocurría contarle a Jason, sé que terminaría sonsacándome información hasta llegar al verdadero motivo de mis heridas, y no quería preocuparlo más. Sacudí la cabeza y extendí el brazo para tomar el trago, sin seguir las reglas del juego me empiné el vasillo y vacíe su contenido en mi garganta.