Capítulo 6 "Yo"

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- En serio, yo nunca confié en ese Seok.- Comentó enervado un elfo moreno y de mayor estatura llamado Mateo quien no era más que uno de los mejores amigos de Lina.

Allí se encontraba charlando ese peculiar grupo compuesto por cuatro elfos y un hada mientras resolvían los ejercicios de Aritmagia orientados por su profesor .

- Teo está bien, tuvo sus motivos.- Trató de justificar la actitud del mago de cabellos negros para que un Will, el elfo de cabellos azules y portador de espejuelos, escéptico alzase sus cejas en señal de sorpresa ante la bipolaridad de su amiga.

- Pero esos motivos no fueron más fuerte que tus sentimientos por él o sí .- Opinó en tono neutral el otro dríade, June.

- Eso no es cierto.- Refutó nerviosa sin percibir que sus mejillas se tornaban color carmesí.- Es más complejo de lo que parece.

- Eso lo confirma.- Señaló a las mejillas teñidas de un suave carmín - Y también tu cabello, algunos mechones se tornan rubios ante la presencia de emociones relacionadas con el amor.- Añadió sin despegar la vista de su libro el otro elfo de la naturaleza a parte de Mateo.

- ¿Qué vas a hacer? - Cuestionó el pelirrojo, Lee, pronunciándose por primera vez en la conversación.

- No tengo ni la menor idea Lee.- Susurró cabizbaja, mientras descansaba sus brazos en su regazo.

- Lina estaremos siempre para ti, no lo dudes.- Aseguró el de cabellera azul sujetando las manos de la aludida.

Sus amigos eran su santuario.

- ¿Han visto a Gumbert? - Interrumpió de la nada una chica morena de pequeña estatura en tono meloso, provocando que los presentes lucharan internamente por el control de sus expresiones faciales a excepción de Lee quien no se preocupaba en denotar puro fastidio en su rostro, el cual decidió despacharla lo más rápido posible

- Gabrielle, Gumbert estudia en tercer año, no aquí que es primero.- Aclaró irritado el de cabellos rojizos.

Mientras esto sucedía un par de brujas se dedicaba a perseguir a un dúo de hechiceros los cuales obviamente les descubriendo espiándolos lo cual era la razón de una Camille nerviosa y una Sun pensando en cómo soltar toda la información sin ser vista como una loca.

- Bien... puede que se estén preguntando ahora mismo quién rayos somos nosotras, pero lo que no saben es que al igual que ustedes nosotras llegamos aquí de la nada y sabemos que retrocedieron el tiempo con el ese extraño arco y el colgante de aquel elfo.- Comenzó a hablar la de cabellos rojizos a los jóvenes hechiceros que trataban de almorzar con tranquilidad en medio del jardín.

- ¿Cómo sabes que venimos del otro lado e hicimos eso?- Cuestionó Joe a la vez que jugaba con un tenedor.

- Digamos que viene del futuro al igual que ustedes y tenemos esta oportunidad para evitar que ocurra una masacre o el mundo se acabe.- Planteó Camille como si de hablar del clima se tratara tomando asiento a su lado sin prestar atención a las continuas miradas de reprobación y desprecio por parte de algunos estudiantes y profesores que rondaban por allí.

- Digamos que acabaste de salir de un manicomio por lo que no deberíamos creerte.- Le contradijo el hechicero más joven, Joe.

- Chris ya te dije que tú pareces un algodón de azúcar, eres como las flores de mi primavera. Eres el Sol de mi sistema solar, eres la estrella más brillante de mi galaxia, eres la constelación de mi corazón. Te amo.- Soltó en tono caballeresco Cam, provocando que el rubio maldijese por lo bajo frases incomprensibles.

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