Capítulo Final

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 La rubia una vez llegó a su casa se encerró en su habitación y de su mochila sacó la caja que Mason le entregó, en ella había fotografías Polaroid de ella con el chico, de ella con sus amigos donde estaban en un día de campo, cerca de un lago, trataba de recordar pero el dolor de cabeza llegaba en forma de olas, soltó un quejido agudo adolorido pensando que estaba teniendo una contusión cerebral, se tapó la boca y se había olvidado que su habitación no era a prueba de sonido, la puerta fue abierta por Mary que entró como si fuera un huracán de preocupación y seriedad, bajó la vista hacia lo que tenía en sus manos, la preocupación se transformó en enojo y ahora todo lo que la señora Andries veía era rojo.

 Adele inmediatamente escondió la caja blanca bajo su cama pero era demasiado tarde, a su madre no le importó la caja y no pensó revisarla porque ella sabía que era una caja, una simple jaula cursi de recuerdos y la señora Andries sujetó el rostro de la chica entre sus manos, Adele rehuía al tacto de su madre, realmente no quería sentir el amor tóxico que la mujer le entregaba, un amor que funcionaba para apartarla de su verdadero amor, ese chico de cabellos negros y ojos como el cielo del día en el que ella se enamoró por primera y única vez en su vida.

 -Hija, te dije que te alejaras de ese chico, él te arruinó la vida-Dijo Mary con una sonrisa tratando de convencer a su hija.

 -No, mamá-Gritó Adele sosteniéndose la cabeza y alejándose-Tú la estás arruinando en este momento, porque tengo dieciséis años, soy lo suficientemente grande para tomar mis propias decisiones, lograr mis propias metas y cometer mis propios errores, así que solo te pido que no te metas en mi vida amorosa, porque eso es lo que es, es amor, es una decisión que estoy haciendo, si es bueno déjame hacerlo y si es malo, déjame cometer este error, soy una adolescente debería tener peleas normales con mi madre pero tengo esta pelea..,contigo...porque toda mi vida has manipulado mis recuerdos, haciendo quedar a Mason como el malo de la película.

 -Él te ha engañado, cuando te has ido no te buscó ¿Y crees que eso es amor? Para colmo, cuando volvimos a Whyalla, él volvió a buscarte para usarte, abre los ojos Adele, él es venenoso, solo quiere usarte como siempre lo hizo.

 -La única persona que me usó está parada al frente mío.

 La joven giró el rostro cuando sintió la bofetada de su madre, las lágrimas comenzaron a salir y lo último que Mary pudo escuchar fue el llanto de desesperación que estaba soltando su hija, la chica salió del departamento con las manos en su rostro, su madre la llamaba por su nombre pero ella ya estaba corriendo a las afueras de lo que era su casa, Adele corrió por las calles de una ciudad que parecía desconocida para ella, a pesar de que esa era su ciudad natal, una ciudad que estaba llena de recuerdos que estaban mezclados, casi sepultados dedicándole una sonrisa que no correspondía y salían de la tierra como si fueran personas resucitando.

 Los recuerdos que ella siempre tuvo, siempre estuvieron presentes haciéndole compañía pero nunca despiertos, cada vez que veía a Mason podía recordar tanto lo bueno como lo malo, recordaba el anillo que él le había dado pero también recordaba el beso que él le dio a aquella chica pero recordaba todas las veces que él se quedaba hipnotizado con el aroma de su cabello, cuando veía a Kako recordaba a la castaña quejándose de ella cuando le recomendaba cuál pollera usar y así con cada uno de sus verdaderos amigos con los que compartió tantos momentos sin saberlo.

 Parecía que la chica caminaba sin rumbo pero en realidad estaba caminando al lugar del cuál estuvo hacía unos momentos, en cuestión de una hora llegó a la casa de Mason, le costó llegar porque se perdía entre las calles de Whyalla pero allí estaba, entró al edificio y cuando se abrieron las puertas del ascensor ella entró hasta llegar al piso donde vivía el morocho junto a su padre y golpeó la puerta con brusquedad, tocó el timbre esperando a lanzarse a los brazos del chico pero una mujer de cabello negro y ojos marrones le abrió la puerta preguntándose qué hacía nuevamente allí.

Los Recuerdos de AdeleWhere stories live. Discover now