LIBRO 2- TÚ ERES MÍA.
ALMAS GEMELAS.
(((CORRIGIENDO Y EDITANDO)))
Se habían separado y aun así estaban unidos por el hilo del recuerdo. Más de un año distanciados y sus corazones seguían unidos, cada uno solo añoraba la presencia del otro, sus ojos...
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Aleska.
Recién llegamos del viaje y estamos saliendo del baño, yo me seco el cuerpo con una toalla buscando una panty en las gavetas y una camisa corta, tomo la crema corporal y me hecho en las piernas y en los brazos, Demian está a mi lado y solo se colocó un boxer.
-Amor, echame crema en la espalda que me duele.
El se acerca a mí y me quita el pote de la mano y yo me coloco de espaldas y siento cuando esparce crema por toda mi piel, me siento cansada producto del viaje y con hambre, así que hablo en la posición en la que estoy.
-¿Que preparo de cenar?-Me giro quedando frente a él.
-No se-Tira el pote de la crema en la cama-¿Qué quieres comer tú?-Me toma de la barbilla para que lo mire.
-Cómo dices que estoy comiendo muchas cosas poco saludables puedo hacer una ensalada césar, ¿Quieres?
-Sí, está bien-Me toma de la mano y salimos a la cocina.
Busco en la nevera la lechuga, el jamón y el queso amarillo, la mayonesa y la mostaza y después me voy a la alacena sacando los panes de sándwich.
-¿En qué te ayudo?-Se cruza de brazos recostando su espalda de la barra.
-Pica el jamón y el queso amarillo en cubos mientras yo doro los grutones y lavo la lechuga.
Entre los dos hicimos un cuenco grande de ensalada y para qué negarlo se ve apetecible, Demian se va con el cuenco a la sala encendiendo la televisión mientras yo llevo dos platos y tenedores, llevo aparte un paquete de pan de sándwich.
Ambos nos sentamos en la alfombra y nos servimos ensalada en los platos, Demian se llenó con el segundo plato, y yo estoy come que come y siento que ni me llega al estómago.
-Quedo buena la ensalada, ¿No?-Dice Demian haciendo que fije mi atención en él, que me mira mientras como.
-Sí, quedo deliciosa, ¿No te gustó?-Me termino de comer la ensalada que queda en el cuenco y tomo otra rebanada de sandwich.
-Ujum-Me mira mientras como-Quedo buena, solo lo digo porque te comiste ese cuenco tu sola y era grande, demasiado grande para dos personas diría yo.
Lo miro mal llevando más ensalada a mi boca.
-¿Me puedes dejar comer en paz?-Me molesto.
-Puedes comer lo que quieras, pero después no te quejes que andas gorda.
-Demian no me hagas sentir mal-Llevo comida a mi boca-Si tú estuvieras dentro de mí y sintieras lo que yo siento, no me juzgaras tanto.
-Es que comes demasiado Aleska-Me mira cuando tomo otra rebanada de pan-¿A donde mierdas se te va la comida?, Bueno... ya se para donde se te va.
