LIBRO 2- TÚ ERES MÍA.
ALMAS GEMELAS.
(((CORRIGIENDO Y EDITANDO)))
Se habían separado y aun así estaban unidos por el hilo del recuerdo. Más de un año distanciados y sus corazones seguían unidos, cada uno solo añoraba la presencia del otro, sus ojos...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Aleska.
Estamos aún acostados en el sofá cama y ya los rayos del sol se asoman por el ventanal de la sala alumbrando todo. Demian está acostado a mi lado boca abajo con su cabeza cubierta por una almohada, su espalda fornida está desnuda y solo una cobija cubre su parte baja, solo tiene puesto un bóxer.
Mi cuerpo aún está adolorido por la intensa noche que tuvimos, si, aún me duele mi sexo y mi trasero y para ser más específica, me duele todo, absolutamente todo, hasta la garganta.
Quito la cobija que arropa mi cuerpo y puedo ver los rosetones y moretones que aún adornan mi abdomen, están también en mis tetas y en las caras de mis muslos, Demian sí que no se midió a la hora de poseerme y hacerme nuevamente suya.
Y a pesar de que nada recuerdo de lo que pasó, como tampoco quise ver los vídeos, las marcas en mi piel y el dolor que aún siento en las zonas prohibidas de mi cuerpo me hacen saber que la pasión, el deseo y la lujuria fueron los protagonistas de esa noche y que nosotros solo fuimos esclavos del placer y la perdición de poseernos mutuamente, saciando las ganas, matando el deseo y avivando las llamas, despertando así, mis demonios ninfómanos que estaban dormidos más no muertos.
Me estiro tomando mi móvil y ya son pasadas las 11 de la mañana y Demian aún duerme y no tiene la más mínima intención de levantarse, su familia viene de visita hoy y pareciera que tal cosa no le diese emoción, fuese mi caso, y no hubiese dormido en toda la noche de tan solo saber que mi familia me visita.
Dejo el móvil a un lado y me acuesto en su espalda haciéndolo gruñir, porque le estoy interrumpiendo su profundo sueño.
-Amor levántate-Escondo mi cara en su cuello-Tu familia viene y tenemos que ir al súper y después arreglar el departamento.
-No voy a arreglar ninguna mierda-Advierte en la posición en la que está-Te dije que no me gusta limpiar, además, mi mamá me avisó que perdieron el primer vuelo, se vienen en el de las 2 de la tarde, así que podemos hacer nuestras cosas relajados.
-Pero Demian entre los dos debemos limpiar el departamento, no empieces.
-Entre los dos nada, yo tengo quien me limpie.
Tuerzo los ojos, cada vez es lo mismo cuando nos toca hacer limpieza, la verdad no veo la necesidad de pagar para que lo hagan, ¿Que tanto se puede limpiar si solo vivimos él y yo aquí?
-Está bien-Dejo de insistir tumbándome a su lado y fijo mi mirada al techo-¿Podrás hacer el desayuno mientras yo limpio?
-No.
-Joder Demian-Fijo mi atención en su espalda-En algo debes de ayudarme.
-Pero no lo voy a hacer.
-¿Por qué eres así?-Me coloco de medio lado apoyando mi cabeza en mi mano y hago círculos con mis uñas en su espalda desnuda-Cuando estaba embarazada si me ayudabas, ahora ya no.
