Capítulo 39

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Nueva York

Ava.

-¡Es hermoso!.- Mi corazón se infla al tener en mis brazos a la pequeña «muy pequeña» personita hinchada.- Te estuve esperando por mucho tiempo, ahora tenemos que meter presión para conseguir a la mini Ava.

-¡Ava!.

-¿Qué? Estoy ocupada hablando con mi sobrino.

-¿Por qué no le pones tú a tu hija Ava y dejas a la mía futura?.- Hago una mueca.

-¿Estás loca? Imagínate al pobre padre con dos Ava's en casa.

-A Edan no creo que le moleste.- Está usando el tono sugerente que siempre me molesta.

-No digas tonterías.

-Te ves bien con un bebé en brazos.- Otra vez ese tono.

-Para haber sacado este precioso ser por un agujero de tu cuerpo estás muy bromista.

-Uy, estás de mal humor. ¿Que le pasó a tu galán?.

Me giro con el bebé en brazos dándole la espalda. Edan está muy enfadado conmigo, he intentado llamarlo y mandarle mensajes mientras esperaba a que el pequeño se dignara a salir pero no me responde ¿Tanto por habernos visto en esa cafetería?.

He tenido que recurrir a Katy y le he preguntado directamente si ha visto a Edan en la universidad esta mañana y me respondió que lo vio, estuvo veinte minutos de clase y se marchó sin más. Tampoco dio clase O'Donell. Edan comienza a preocuparme y lo peor es que empieza a calar su ausencia.

»¿Mamá y papá han venido?.- Isa cambia de tema al verme cambiar de humor drásticamente y esto me pone peor.

-Vienen en cuanto se desocupen con su cliente.- Ella asiente pero está a punto de llorar y yo me acerco rápidamente sentándome a su lado.- Oye, tranquila. Seguro no tardan en llegar.

-Si es solo que... es su nieto Ava, el primer nieto de la familia y están con un cliente en lugar de haber venido a verme.- Lloriquea y no quiero que se sienta así, me rompe el corazón.

-Hemos estado aquí Mila, yo y lo más importante que Erick está aquí más feliz que una perdiz.- Le limpio las lágrimas con una mano.- Deberías estar feliz ahora mismo, estás formando tu propia familia y eso es lo más importante.

Asiente mirando al bebé que tengo en brazos que hace una mueca cuando tiene hambre pero sorprendentemente no llora, solo se mueve desesperado. Se lo paso a su mamá que no tarda en alimentarlo.

Aparece Erick con una sonrisa de oreja a oreja y esa mirada llena de ilusión que no deja de estar desde que salió a gritarme prácticamente que ya había nacido, entra con un montón de flores, chocolatinas y globos que ha traído alegrando el momento.

-¿Y bien?.- Me dirijo a ambos.- ¿Cuál es el dichoso nombre?.

-Andrew Rymer Collins. Predeterminará el Collins.- Dice Erick sin apartar la vista del bebé y yo ruedo los ojos pero esta vez feliz.

-No nos veas así Ava, escogimos ese nombre porque tiene tu inicial.

-Vale, me convencieron es lindo. Pero aún así quiero una Mini Ava.- Isa me asesina con la mirada y Erick me da una sonrisa cómplice.

***

Después de tres días en casa de mi hermana ayudándole con Drew es hora de volver, insistí que podía arreglármelas pero Erick insistió en llevarme a Connecticut él mismo. Mis padres fueron a visitarla al hospital mientras yo iba a descansar y he tenido suerte de no topármelos. Aún no recibo respuesta de Edan y Katy me ha informado que no se ha presentado a clase, cada vez estoy más ansiosa por no saber nada de él.

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