PRIMER LIBRO DE LA TRILOGÍA DARK
𝐓𝐑𝐈𝐇𝐘𝐁𝐑𝐈𝐃 | ❝ El infierno se queda corto a lado de una mujer con sed de venganza ❞
𝐀𝐋𝐈𝐂𝐈𝐀 𝐌𝐈𝐊𝐀𝐄𝐋𝐒𝐎𝐍 la ultima de la Dinastía Mikaelson, hija del temido Nicklaus Mikaelson y Hayley Marshall. Al...
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CAPÍTULO UNO
DESPIERTA
Un jadeo sale de su boca, buscando oxigeno y sintiendo un aire demasiado frío recorrerle el cuerpo, ella baja la mirada...
Ya no se encontraba en su habitación, todo a su alrededor era oscuro y solo podía sentir sus pies descalzos sobre una superficie húmeda y el frío aire recorrerle toda la columna vertebral. Sus labios titireaban y se abrazó a si misma en busca de calor. A lo lejos escuchaba un silbido que le hizo tener piel de gallina, sintió miedo...
Ella casi nunca siente miedo...
En cuanto dió un paso a donde sea que haya dado, sintió caerse a un abismo donde al parecer nunca parecía llegar el final. Se sentía desesperada y asfixiada.
—Despierta, Alicia. Despierta.
Se decía una y mil veces.
—Despierta.
Soltó un lloriqueo al sentir su espalda chocar contra algo duro.
Algo líquido llegó a sus manos, era pegajoso y un tanto espeso. Levantándose lentamente ahora pudo apreciar mejor el lugar ya que había un poco más de claridad, soltando un grito ahogado al darse cuenta de lo que había a su alrededor.
—No, no, no —negó, cerrando los ojos—. Es solo un sueño, es una pesadilla.
—¿Lo es? —una segunda voz se escuchó. Era más gruesa y un tanto cansada—. ¿Segura que es un sueño, Alicia?
—Despierta, Alicia. ¡Despierta!
Se hincó en el suelo tratando de olvidar la imagen de toda su manada muerta a su alrededor, ignorando el hecho de que sus manos se encontraban llenos de sangres mientras que sus garras estaban afuera y ellos tenían... marcas de rasguños.
Un jadeo sale de su boca, buscando oxigeno y sintiendo una superficie suave, pero un aire frío a su alrededor, ella baja la mirada...
Era su cuarto, nada cambió. Solo fue una pesadilla, ella lo sabía.
Se paró con pereza buscando sus pantuflas y una liga para cabello para luego ir al baño y lavarse la cara rápidamente. Salió de su habitación y no pudo percibir el aroma de Isaac por ahí, raro.
Risas se escucharon desde su sala lo cual le pareció extraño ya que ahí solo vivían dos personas. Totalmente alerta se acerca, quedando estática en su lugar a las personas que hace segundos estaban riendo y ahora la miraban con una sonrisa.
