33. BEA

223K 24.6K 19.1K
                                    

BEA

Un funeral

Llanto...

Silencios...

Dolor...

Impotencia...

Jamás imaginé esto, me cuesta mucho mantenerme de pie, todos están vestidos negro. El aire es pesado, triste, asfixiante. Alguien pasa, ofreciendo agua y café, ni siquiera puedo hablar. Todo esto me recuerda a Beth, a su funeral, lo doloroso que fue.

¿Por qué? Hace veinticuatro horas, todos estábamos juntos, bien, bebiendo cerveza y comiendo pizza. Todo era perfecto... y ahora todo...

Se ha ido a la mierda.


VEINTICUATRO HORAS ANTES.

—¡Abran paso, abran paso!

La voz escandalosa de Black hace eco en el espacio confinado de las escaleras de este edificio. Amber y yo abrimos paso para que él se escurra entre nosotras y suba los escalones, cargando una caja inmensa. Yo llevo una lámpara en la mano y Amber lleva una silla, sacudiendo la cabeza.

—¿Recuérdame porque debemos ayudar a Red a mudarse?

—Porque somos sus amigos. —Suspiro, subiendo—. Además, prometió pizza y cervezas.

Las cosas que llevamos no pesan mucho, pero subir dos pisos con cosas es agotador cuando lo haces una y otra vez.

—Sigo pensando que no es el momento para esto —agrega Amber cuando llegamos al piso y entra de espaldas en el apartamento—. ¿Mudarse en navidad? Sus padres deben estar como locos.

Pongo la lámpara en el mesón de la cocina.

—Consiguió un descuento por tener el día de mudanza en estas fechas, al parecer nadie lo hace.

—Y con mucha razón.

Nos giramos y vemos todas las cajas en el suelo y cosas por todos lados, el apartamento es un estudio pequeño, con una sala unida a la cocina y una habitación que no se compara en tamaño a lo que tenía en casa de sus padres. Sin embargo, este es su espacio, y sé que, para él, es un logro muy grande.

—No entiendo porque se mudaría, sus padres son increíbles —dice Amber.

Le doy una palmada en la espalda.

—No necesitas tener padres cuestionables para querer tu propio espacio.

—Lo sé. —Ella sonríe—. En realidad, estoy celosa, muero por salir de la casa de mis padres.

Black emerge de la habitación, sudado, a pesar de que está frío afuera. La subidera de escaleras parece ser un ejercicio para todos.

—Creo que ya no hay nada más, se pueden quedar aquí y empezar a acomodar.

—Sí, señor director de mudanzas. —Lo molesto y él entrecierra los ojos.

—Estás despedida.

Jadeo.

—Guao.

Black me guiñe el ojo.

—Bueno, hay maneras de hacerme cambiar de opinión.

Volteo los ojos y Amber le lanza bolsa llena de ropa. Black la atrapa en el aire y la pone a un lado.

—No te pongas celosa, baby, para ti también hay.

Amber busca en las bolsas periódico y la veo acercarse a Black para comenzar a envolverlo. Y lo entiendo y suelto la carcajada. Los labios de Black forman una sonrisa juguetona.

Black & Blue (Español)✔️Where stories live. Discover now