El Primer Héroe - El único deseo del demonio [Rojo y los héroes del nuevo mundo]

Capítulo 17 - planeamiento de guerra -

Vinieron aviones en dirección a la nave que luchaba por irse lo más rápido posible totalmente destruido, sin dudarlo rodearon la nave como abejas rodean un panal y le comunicaron por la radio a la General.

— Tropa de la Nave de La organización FE, deben detenerse a nombre de la fuerza militar de cuba — al escucharlo la General Niara apretó los puños sobre los soportes de su asiento —, en caso contrario tendremos que atacar lamentando muchas bajas.

— Comunícame — dijo la General a uno de los subordinados en los ordenadores holográficos y luego hablo —, ya hemos lamentado bajas, y no han hecho nada para evitarlo, ahora solo le puedo pedir que se retiren y nos dejen que nosotros nos vayamos lejos de sus tierras.

— Negativo, deben desistir o serán atacados.

— Muy bien — entonces la general le hizo una señal y la comunicación se cortó —, ya me hicieron enojar... liberen el pulso desestabilizador.

La nave parecía estarse cargando, y entonces comenzó a recibir los ataques de los aviones cubanos, la nave tembló y en menos de un segundo dejaron de recibir ataques. Afuera se había visto otro espectáculo, una especie de onda expansiva se propagó y cuando llego a los aviones estos cayeron como mosquitos con repelente.

— Vendrán más aviones, pero si son prudentes sabrán que perseguirnos no les conviene.

— Vaya consuelo — dijo Lara con los brazos cruzados y luego se quiso retirar.

— ¿A dónde se dirige? Señorita Lara.

— Nos trajiste aquí para buscar a Percy, y mágicamente él desapareció luego... ya no tenemos nada que hacer aquí.

— Podría necesitar su ayuda en esta guerra que viene, señorita Lara ¿Qué podría hacer para que reconsidere quedarse?

— Ya nada me importa.

¡Tít! ¡Tít! Sonó en uno de los muchos monitores elevados sobre la General, Lara volteo a ver y entonces supo que Percy había vuelto, pero ahora estaba mágicamente en otra ubicación del planeta, ahora estaba en la India.

— Tal vez ahora, si pueda reconsiderarlo — dijo la general girando sobre su asiento hasta poder ver de frente a Lara.

•••

Cuando finalmente llegaron a Corea, la nave aterrizo sobre una pista de aterrizaje de aviones, lo suficientemente extensa como para que pueda parquearse aquella máquina totalmente destruida, salieron y los estaban esperando, muchos Soldados puesto lado a lado rodeando una alfombra que conectaba con la salida.

Al salir se acercó un hombre asiático con más hombres vestidos de traje, fueron recibidos por el y la primera que saludo fue a la General Niara, agachando la cabeza y doblando su cuerpo y el hombre que saludo primero hablo en coreano y nadie entendió.

— Es un placer señor presidente — dijo la General y procedente a eso hablo en el mismo idioma que el presidente.

— Muy bien — dijo Max susurrándole a Kora —, tengo entendido que Corea está dividida en dos, ¿esta es la Corea chida o la mala?

— Je, eres un tonto Max, ambas Coreas están de nuestro lado, no importa.

•••

Los noticieros los habían tenido rodeados, sacándoles fotos y haciéndoles preguntas en coreano, desentendiéndose completamente de lo que estaban escuchando. Finalmente, llegaron a la sala de presidencia, donde podían platicar más a gusto, aunque realmente solo la General Niara platicaba con el presidente. El resto del grupo solo se quedó sentado en un sillón.