Había un árbol en un parque cercano a la zona en la que Fallon vivía, este parque era tan solitario y más después de las seis, pero, tenía los árboles más grandes y frondosos que jamás había visto. Citó a Namjoon en el más grande y ya pudo divisar su bicicleta acercándose al lugar donde podía dejarla y caminar el tramo restante.
Se sintió muy mal porque él parecía verse bien, arreglado, mientras ella llevaba ropa deportiva tres tallas más grande, un hoodie con gorra que casi la cubría entera. Levantó una mano, solo sus dedos quedaban a la vista por lo mismo, las mangas del hoodie eran muy largas.
Aún así, él la vio y se acercó hasta estar frente a ella.
—Hola.
—Hola— le respondió— perdón si tardé, no conozco la zona y venía en mi bicicleta.
—No te preocupes, no tardaste nada— en realidad sí, mucho— ¿Quieres sentarte? Este árbol es cómodo, bueno para la espalda.
No sabía por qué dijo eso.
—Está bien— ambos se apoyaron contra el tronco al mismo tiempo y se deslizaron hacia el suelo, manteniendo una buena distancia entre ambos— ¿Qué quieres hablar que es tan importante?
Observó las palmas de sus manos, luego las limpió en sus piernas, estaba sudando.
—Quería disculparme por lo que sucedió en los premios, no debí acorralarte de esa manera en el camerino y... siento que en lugar de haber hablado, solo nos gritamos los hechos sucedidos hace años. Creo que es necesario que aclaremos todo ese malentendido.
—¿Malentendido?
—Si, porque eso fue. Tu historia es muy distinta a la mía, déjame contarte lo que verdaderamente sucedió y luego puedes elegir si creerme o no.
Se acercó un poco, sentía que estaba hablando muy alto por lo lejos que estaba.
—Te escucho.
Respiró aliviada, no creyó que lo haría.
—Primero que nada, nunca jugué contigo o me burlé de tí, estuve esperando mucho tiempo para mandarte esa carta, dudaba mucho de hacerlo porque tenía miedo de causarte problemas, ya habías debutado y yo seguía siendo una aprendiz— pasó saliva— puedo jurar que no se trató jamás de una mala broma, yo no soy así, incluso... tuve ese resentimiento hasta la actualidad, estaba tan enojada contigo porque no respondiste mi carta.
—Si lo hice, ya te lo dije.
—Pero nunca me la entregaste por culpa de esas idiotas egoístas— gruñó— ellas estaban dejando los dormitorios porque cancelaron el debut grupal y estaban resentidas conmigo porque acepté debutar como solista. Seguro fue una venganza, ellas s-sabían que me gustabas demasiado.
Namjoon era su primer amor, el primer hombre que vio y despertó interés en ella, gracias a él descubrió que tenía un tipo específico, Namjoon era inteligente, un genio, a ella le fascinaba, guapo, un caballero, alto, sus hoyuelos eran los más hermosos que había visto nunca, le encantaban sus mejillas y su deseo siempre fue apretarlas, su cabello, su forma de hablar, su voz, su visión de la vida y como inspiraba al mundo con cada cosa que decía.
Tan, tan lindo. No podría superarlo nunca.
—Es que, era una época distinta— fue su respuesta— el Namjoon de ese momento no es el mismo que ves ahora, mis inseguridades me orillaron a creer que ellas tenían razón al decir que no podrías fijarte en alguien como yo, me consideraba un chiste.
—Siempre has sido increíble, un ser humano espectacular— se le escapó lo último— fuera de este mundo que no te merece.
El pecho de Namjoon se infló y llenó de calidez, una sonrisa pequeña tirando de sus labios.
—Entonces— volteó la cabeza a mirarla— todo lo que decía la carta era real.
—Lo era, de nuevo, puedo jurarlo. Estuve esperando una respuesta, incluso si era una negativa, un rechazo, pero lo que sea me servía para al menos darle un cierre a mis sentimientos.— le devolvió la mirada—Dijiste que yo también te gustaba, eso era verdad o...
—Totalmente verdad.
—Si recuerdas lo que respondiste en la carta... agradecería que pudieras decírmelo ahora.
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