Namjoon estaba mirando al suelo mientras compartía con los chicos una de las salas en las que usualmente se reunían, pensaba y se insultaba él solo.
—Soy tonto— decía en voz alta.
Pero, al mismo tiempo, pensaba que tenía razón y que actuó bien, conoció la tensión física con Fallon en un lugar público. No podían besarse en la calle, aunque las posibilidades de ser vistos eran muy pocas, aún podía suceder.
—Eh, líder— espabiló— que por qué eres tonto.
Se encogió de hombros.
—Nada, solo, aquí pensando.
Luego del comunicado sobre su relación, todavía no entraba a redes, había escrito algo para comunicar a army, pero quería esperar un poco más para hacerlo público. Entonces, su madre lo llamó en la madrugada para preguntar por él y su novia de la cuál ya le habló días atrás, por supuesto que a ella le interesaba saber sobre la vida amorosa de su hijo.
Se preguntaba si Fallon le había hablado de él a sus padres.
Con esa curiosidad en mente, se disculpó con los chicos, vio la hora y en unos minutos, las prácticas de Fallon terminaban, estaba a un piso de distancia, no demoró nada en llegar y quedarse en la puerta viéndola bailar, se sorprendió mucho porque estaba sola, su coreógrafa no se encontraba a la vista, por lo que se tomó la libertad de entrar.
Fallon lo vio gracias a los espejos y se giró en su dirección, contenta de verlo.
—Namu— pronunció dulce, a él le gustaba mucho cuando lo llamaba así.
Mientras se acercaba, Namjoon reparaba en su apariencia solo para confirmar que tenía una novia hermosa que podía ponerse una bolsa de basura y todavía lucir perfecta.
Su cabello corto estaba recogido en dos coletas, llevaba un top blanco que le permitía ver su abdomen, cortesía también de los leggins y zapatillas igualmente blancos.
—¿Terminas pronto?— asintió.
—Estaba practicando algunos pasos, tengo una última presentación— se encogió de hombros— luego, puedo estar tranquila y en quietud, soportando las actividades que la empresa tiene para todos nosotros, aunque, con suerte, no estaré incluida allí por ser solista.
Ella siempre huía cuando tenía que socializar, Namjoon negó con la cabeza.
—No vas a salvarte esta vez, incluso nosotros estaremos— hizo mala cara, casi un berrinche— será divertido, vamos a jugar en un inflable sobre el agua.
—Lo dices porque ustedes ya han hecho eso, yo no, si me ahogo te quedarás viudo, piensa en eso.
—¿Cómo vas a ahogarte si sabes nadar, Fallon? Te va bien en deportes.
—Es que soy competitiva y me van a odiar porque siempre gano.
Se llevaría muy bien con Jungkook.
—Buscando excusas— se reía, Fallon continuaba con su negativa— que no, que vamos a convivir todos.
—¡Estaré yo sola y me veré ridícula!
—Una gorra y liga para el cabello, te sientas en medio de nosotros y nadie se dará cuenta de que repentinamente somos ocho.
—¿Vas a obligarme? Siento que vas a obligarme, te odio.
—Que bien que me conoces, míralo de esta manera; fortalecerá nuestra relación.
—No creo que tenga mucho que ver.
—Y también fortalecerá tu relación con los demás artistas, creí que te interesaba hacer amistades.
—Ya te tengo a tí.
—Soy tu novio, Fallon, no tu amigo.
—Eres ambos.
Cerró sus ojos un segundo.
—¿Sabes en qué eres realmente buena?
—¿En qué?
—Eres excelente agotando mi paciencia— se soltaba a reír, Namjoon daba la vuelta para abandonar la sala de prácticas— tendrás que ir, fin de la conversación.
—Solo si vas a estar conmigo, de lo contrario no quiero, bueno— suspiraba, deteniéndolo— eso sí nos lo permiten, lo cual dudo.
Él también lo creía poco probable, acunó su mejilla, inclinándose para besar la punta de su nariz, nadie estaba pasando por allí, así que... bajó un poco, su intención fue la de presionar su boca en la de Fallon un breve segundo.
Segundo que se convirtió en un suspiro profundo y un beso prolongado, en el cuál él abrazó la cintura pequeña y ella hizo lo mismo con su cuello.
Él estuvo evitando lo inevitable; caer más profundo.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
