THE SOLOIST❝ knj

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—¡ERES NUESTRA ÚNICA ESPERANZA, NOONA!

Y Fallon ya quería rendirse.

Estaban subiendo una montaña inflable y el juego consistía en mantenerse allí aunque dicho inflable se sacudiera, todo su equipo había caído y solo ella quedaba para salvar la esperanza de triunfo.

También quedaban dos integrantes de SEVENTEEN, y uno de los grupos restantes, mientras TXT le pedía a gritos que no perdiera, BTS hacía lo mismo con Jungkook quien estaba tranquilo o fingía estarlo.

Gritó cuando un dron pasó muy cerca de su rostro, riendo después.

—¡¿Pueden rendirse para acabar con esto?!— no identificó a quien gritó aquello, pero supuso que fue alguno de la numerosa agrupación.

—En qué me vine a meter— murmuró, viendo a su equipo cantarle porras de ánimo.

Lo bueno era que, desde allí podía ver a su novio de brazos cruzados, mojado de pies a cabeza. Muy guapo.

Ella seguro se veía como un pajarito feo. Alguien cayó o se lanzó a voluntad.

—¡FALLON NOONA!— la llamó Kai.

—¡¿QUÉ?!

—¡INTENTA IR HASTA ARRIBA!

No sabía para qué exactamente, pero siguió escalando el inflable a una velocidad de admirar, entonces vio que era plano en esa parte, respiró profundamente y feliz porque podía sentarse y sostenerse sin terminar muy cansada.

—¡YA GANAMOS!

Hasta que Jungkook comenzó a preguntar si podían lanzarse entre ellos y le dieron permiso para empujar.

Se preocupó. Él era mucho más grande y fuerte que ella, su espíritu competitivo no la salvaría y cuando tiró a todos los demás, algunos cayendo intentando escapar de él, lo vio escalando en su dirección a todo lo que daba.

Gritó, dejando su comodidad para moverse y no dejarse alcanzar, escuchando las risas de los demás presentes. Seguía gritando.

—¡DEJA DE MOVERTE POR FAVOR!

Al menos queriendo derrotarla seguía siendo amable.

—¡SOLO AGUANTA UN MINUTO MÁS!—los gritos desesperados de Yeonjun eran de otro mundo—¡NO GANAMOS PERO TAMPOCO PERDEMOS!

Todo era un desastre, sus propios gritos, las risas del resto, ahora sus piernas empezaban a cansarse y su cabello pegándose a su rostro, todo eso hizo de ese minuto, el más largo de su vida hasta que alguien gritó la palabra empate.

Se dejó caer de espaldas al agua y regresando a la superficie, no se negó reír mientras su equipo se lanzó para ir a buscarla, Fallon se deshacía en risas.

—Eso nos dio muy buenos puntos, todavía podemos ganar— Beomgyu aseguraba.

Fallon necesitaba sentarse.

Namjoon estaba esperando a Fallon fuera de vestidores, la vio despedirse de los menores y suponía que ella también iría a su casa a descansar.

Ella salió, secándose el cabello y le sonrió enormemente, acercándose a pasos rápidos y enseñándole su brazalete de oro, recordándole que ellos habían ganado los juegos de ese día, Namjoon solo podía reírse.

—Te gané— repetía, pellizcando su estómago y costados provocando cosquillas.

—Solo por tres puntos.

—¡Igual te gané!— reparó entonces en su ropa de prácticas y negó—¿No vas a ir a descansar? Nam, dormir es muy importante, otra vez no estás dedicando las horas de sueño necesarias.

Él arrugó su nariz.

—Solo estaré una hora en el estudio terminando algo y dormiré después, lo prometo.

—¿Es algo que puedes hacer mañana?

—Pues si, pero no quiero acumular.

Se cruzó de brazos, asintiendo.

—Entonces te esperaré.

—Claro que no.

—Claro que sí.

Fallon dirigió el camino hasta el estudio del mayor, importandole poco la insistencia de Namjoon para que fuese a casa.

—Fallon, hablo en serio, ve a casa— se detuvieron— acabaré en una hora, es trabajo, debo hacerlo.

—Entiendo que puede molestarte que me preocupe.

—No me molesta, solo me parece que te preocupas demasiado.

—¿Crees que exagero?

Tomó aire.

—Un poco.

Fallon asintió, no estaba molesta, solo frustrada.

—¿Sabes por qué te sangra la nariz? Porque no estás descansando ni siquiera unos minutos, te estás exigiendo más de lo que tú cuerpo puede cumplir— relamió sus labios— entiendo que el trabajo es importante, pero necesitas respirar para poder cumplir con el y hay momentos para todo, no siempre se puede mantener un ritmo excesivo.

—Fallon...

—No te quedes hasta muy tarde y come algo.

Medio sonrió, alzándose en las puntas de sus pies para alcanzar a besar su mejilla antes de irse.