GUARDIAN [ Jikook ]

18

Jungkook se mordía la uña nervioso, sentado tipo indio en la cama, sin dejar de ver la puerta con ansiedad y paranoia.

Tenía una hora.

Una maldita hora que no sabía de Jimin desde que salió de ese cuarto y la llovizna había empeorado golpeando con fuerza la ventana cerrada con cortinas negras que obstruye cualquier tipo de contacto con la luz en esa pieza.

Sentía picazón en sus manos con su teléfono golpeando su palma, quería tener noticias de él pero el miedo de encender el aparato lo hacía dudar, pero los nervios de no saber de Jimin lo vencieron, terminando por recobrar vida su teléfono, viendo como se reiniciaba hasta aparecer su pantalla de inició, una foto donde aparece Hoseok, Chanyeol y él.

Los chicos...

Pensarán que estoy muerto.

Se tomó del cabello por un momento olvidando completamente el por que activo su teléfono cuando las frenéticas notificaciones llegaron a su buzón, bajando le la tensión.

245 Llamadas perdidas.

589 Mensajes recibidos.

1800 Nuevas etiquetas.

Jungkook jadeo pasando su mano por la frente.

— Joder, no sé si sentirme famoso o morirme de una vez — tuvo miedo de su vida por los mensajes y llamadas.

Entre las de Hoseok, Chanyeol, Taehyung, su mamá, papá, hermana, primo, ¡ Todos ! Todos sus familiares más cercanos y amigos le reventaron el teléfono de mensajes y llamadas, pero el mensaje entrante le dejo el alma fuera del pecho, y lo hizo saltar de la cama con pánico, siendo el último mensaje enviado de él

Hobi✨

Jeon Jungkook, no pude resistir más, tuve que decirle a tus padre dónde vives. Lo siento amigo, espero me perdones si llega a leer este mensaje, no sabes lo preocupados que estamos todos, te extraño bro 🥺😭

Jungkook estaba apunto que se ponía a llorar leyendo todos los mensajes que le escribía Hoseok en chat, cada uno relatando ya sea algo que ocurrió en la Uni o solo hablando muy triste y desesperado por no tener noticias suyas, al igual que sus padres que le dejaban Miles de audios, con su madre llorando de fondo y su padre maldiciendo, su hermana insultando lo en todos los idiomas habidos y por haber por no contestarle.

— Que carajos hice — hace puchero con lágrimas resbalando por sus mejillas.

Había estado tan sumergido en el tema de Jimin que no se dió tiempo de pensar en que las personas que se preocupan por él estarían mal por su inesperada desaparición  y más tratando de un enorme animal en la cafetería que fue el último lugar donde él fue visto antes que se cerrarán las puerta y solo quedará las palabras de control animal alegando que el Lobo se había llevado a jungkook.

No quería seguir viendo los mensajes que lo llenaban de culpa pero era inevitable, todas las publicaciones en redes, todo el mundo estaba buscando lo hasta por debajo de las piedras. Y él ahí, sentado en el cuarto del causante de su descuido ante la sociedad.

— Conejito ¿ Que pasa ?

Jungkook levantó la mirada asustado, no había escuchado el sonido del cerrojo y mucho menos la presencia de Jimin bajo el marco de la puerta.

— L-lo siento yo...— trago grueso levantando se.

Jimin se acercó sutilmente, arrodillando se frente de Jungkook, bajo su mirada al teléfono y luego a él.

—¿ Que pasa jungkook?— quiso tomar sus manos, pero Jeon lo rechazó, quitando su mano.

— No, Jimin, de-debo ir-irme— hipo con lágrimas, intentando quitárselas con el borde de su suéter.