Luego de todo lo que pasó, entendí porque quienes quieren vivir frente a la cámara, renuncian a la vida normal.
Es demasiado complicado llevar esa doble vida. No sabes quienes están ahí porque te quieren, o quienes están ahí por lo que quieren cons...
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— Apresúrate.
— Ya voy. —se quejó riendo.
— Te pido... un poquito más de velocidad, Pearceboy. ¿Se puede?
— Yo te pido paciencia. ¿Se puede? —dijo del mismo modo, mientras al fin llegaba a la puerta.
— Tendríamos que estar en el set, ya.
— De hecho, no. Tendríamos que estar de camino, y eso vamos a hacer. —en el instante en que salimos del camerino, alguien de la producción se nos acercó.
— Justo venía a avisarles que ya debían ir.
— Te dije.
— Ya vamos. —dije ignorando lo que dijo Pearce.
Cuando llegamos, Jimmy se acercó a nosotros.
— Es un placer ser el portador de las primicias, en lo que a ustedes se refiere.
— Y para nosotros, que tú las des. —le dije yo.
— Espero que el detector de mentiras, no ocasione peleas.
— Tranquilo. Tengo algunas preguntas que quiero hacer. —dijo Pearce, haciéndolo reír.
Segundos después, Jimmy volvió a su silla, entre risas.
— ¿En serio? —dije mirándolo con diversión.
— ¿Qué? Necesito comprobar algunas cosas.
— Bien. Yo comenzaré a pensar en mis preguntas. —él soltó una suave risa, antes de besar mi mejilla.
— ¿Tengo que...?
— Sí. Ese secreto nadie debe saberlo. —dije refiriéndome a las canciones que escribía para él.
Bueno, en realidad habían muy pocas cosas que mencionar. El noventa y cinco por ciento de nuestra relación, era solo para nosotros.
— Oye... voy a comenzar a creer, que es porque no quieres cambiar esa imagen de "no escribo canciones para alguien". —me susurró al oído.
— Sabes que no es por eso. —dije mirándolo seriamente.
— Relájate. —comenzó a reír.— Parece que quieres una excusa para que abandone a Matt hoy.
— No era lo que tenía en mente, pero ya que lo mencionas... —lo miré de forma tierna, para que me diga que sí.
— Solo debes pedirlo, e iré a contigo. Ya sabes eso. —dijo antes de besarme.
— Perfecto. Todo solucionado. Ahora, vamos. Llegó el momento de nuestra primera entrevista juntos, desde que hicimos público que estábamos saliendo.
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