Capítulo 33

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Harry abandona la cocina tan pronto como escucha la puerta de su departamento abrirse. Limpia sus manos en su ropa mientras sale del lugar.

Cuando llega hasta la sala de estar y lleva su mirada hacia la entrada, se encuentra a Zayn vestido de colores pasteles y una mirada avergonzada en su rostro.

El omega solo suelta el suspiro que ha estado guardando en su pecho y se apresura a llegar hasta el menor para tomarlo entre sus brazos y envolverlo en un abrazo que es correspondido de inmediato.

Harry se dedica a absorber el aroma del muchacho, cierra los ojos y deja que sus fosas nasales cosquilleen por la dulzura que contienen las feromonas de Zayn.

Encuentra un poco de miedo, tristeza y una mezcla extraña entre felicidad y enojo. Sin embargo, no dice nada. Sólo se dedica a mover sus palmas por la espalda del ojimiel.

Cuando parece ser suficiente, ambos se apartan al mismo tiempo. Zayn tiene lágrimas lágrimas en su rostro y Harry un puchero pequeño que rápidamente se convierte en una sonrisa encantadora.

—¿Por qué lloras? —pregunta. Sus dedos se apresuran a limpiar con delicadeza toda la humedad, pero parece empeorar las emociones del muchacho porque unas nuevas lágrimas se apresuran a crear un camino en la piel acaramelada.

Zayn niega con la cabeza y sorbe su nariz con un pequeño ruido.

—Te extrañé mucho.

Harry no puede evitarlo. Sonríe ampliamente antes de volver a presionar al muchacho contra su cuerpo para dejar salir su aroma.

Niall aparece frente a Harry con sus manos en sus bolsillos y un rostro ilegible.

—Niall —Harry jadea. Se apresura a detener la fluidez de sus feromonas, y el omega menor se aparta tan pronto como escucha el nombre del otro ser pronunciado.

Cuando ambos omegas se encuentran frente al alfa, este sonríe.

—Solo quería asegurarme de que Zayn haya entrado —dijo en un murmullo—. Pero veo que ni siquiera lo dejaste terminar de entrar.

Harry deja salir una ligera cuando se da cuenta de que se encuentran apenas un paso dentro de su departamento, con la puerta abierta de par en par y completamente sumergidos en el momento.

—Estoy aquí —Zayn dice en voz baja. Harry nota como ni siquiera alza la mirada para verle, sin embargo, prefiere pasar por alto aquello.

El alfa da un paso al frente hasta estar frente al muchacho y no tarda ni un segundo en tomar su mentón y hacerle alzar el rostro para verle. Harry presencia la manera en la que los ojos azules del hombre cambian ligeramente al encontrarse con los del omega, y muerde su propio labio cuando ve a Niall besar la frente de Zayn.

—Iré a trabajar —dice en voz baja, casi intentando que quede solo entre ellos dos—. Puedes llamarme en cualquier momento.

Zayn asiente con una sonrisa pequeñísima en sus labios. El hombre se aparta y se despide de Harry con un gesto de manos y una última mirada al menor de ellos.

Cuando Harry no puede verle después de haber bajado por las escaleras es que vuelve su vista a Zayn, quien le mira de regreso con un rostro lastimero y un puchero en sus labios.

Ese es su cachorro.

Harry cierra la puerta y toma la mano de Zayn de inmediato para llevarlo hasta la sala de estar. Allí le deja en lo que va hasta la cocina y sirve dos vasos llenos del jugo que preparó minutos antes, y regresa para sentarse junto a él en el sofá largo.

Espera paciente y en silencio que el muchacho comience a hablar, lo que parece tomarle más tiempo del necesario. Aún así Harry no se atreve a presionarlo o apurarlo.

Amateur ꩜ abo! larryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora