Polaroid de un pastel (The Vamps)

Tarde de otoño

Nuevo capítulo!! Tendría que haber subido el viernes pero por motivos de estudio no pude. Así les dejo este pequeño regalo por este día martes :)

...................................................

-Tenemos que salir más seguido. La pasé muy bien hoy -le dijo Bradley cuando salieron de la heladería

-Jamás creí decir esto, pero también la pasé muy bien hoy -le dijo sonriendo

-Siento que ahora te sientes con más confianza. No tan retraída como al principio le dijo -espero que no te moleste mi comentario

-No, para nada -le dijo sacudiendo la cabeza -me di cuenta que eres una persona bastante amable y yo no soy muy amigable, pero debo aprender a ser más sociable y creo que contigo estoy aprendiendo de a poco, así que debería darte las gracias

-No, claro que no. Y si te sientes más a gusto conmigo pues me parece genial. Me gustaría mucho que fuéramos amigos

Amelia no sabía si decirle la verdad a Bradley o no. Siempre había estado sola. Nadie se juntaba con ella en el colegio, no salía como los demás. Tampoco se llevaba muy bien con sus padres. Ella sabía que ellos solo trataban de ayudarla pero a veces se sentía muy presionada por ellos.

-Si te molestó lo que dije puedes decírmelo, no me enojaré -le dijo Bradley al notar que Amelia no había dicho nada

-No, no me molestó. Es solo que yo, bueno, yo nunca he tenido amigos -le dijo mirando a otro lado

-¿Ni siquiera en el colegio? -Ella negó con un movimiento de cabeza -bueno, eso ya no será un problema. Desde ahora somos amigos oficialmente

-Mi primer amigo -lo pensó por un momento, después entró en pánico -¿Y si lo arruino todo? -le preguntó con miedo

-No lo harás -le aseguró

-Eso espero

Siguieron caminando. Comenzaba a ponerse el sol. A pesar de ser una fría tarde de otoño el cielo se veía muy lindo. Sin darse cuenta llegaron a una plaza. Era bastante linda. Tenía árboles, bancas y juegos para niños pequeños.

-¿Te gustaría que nos sentáramos? -le preguntó Bradley apuntando a una de las bancas. Ella asintió

Una vez sentados empezaron a mirar a las personas. Los que más llamó su atención era lo feliz que los niños pequeños estaban. A pesar del frio jugaban como si no existiera un mañana.

-¿Te imaginas si todos fuéramos como ellos? -le preguntó Amelia a su compañero

-Vivir el momento, como si nada más importara. Solo lo que estamos viviendo -le respondió de manera reflexiva

Seguían mirando a los pequeños. Era divertido verlos jugar y gritar. Amelia desvió la mirada al cielo. Era una mezcla entre celeste y anaranjado. Se veía bello. Soltó un bufido de frustración involuntariamente.

-¿Qué pasa? -le preguntó el chico

-Es que... -se detuvo y miró directamente a los ojos de Bradley -siento que a veces me gustaría ser una persona diferente. Ser como esos niños. Vivir, disfrutar. Encontrarle sentido a la vida

Bradley se quedó callado por un momento pensando en lo que había dicho la chica. Encontrarle sentido a la vida. Era algo profundo. Él nunca se había cuestionado eso. Le gustaba como era su vida. No necesitaba algún cambio radical ni nada de eso. Quizás a Amelia le faltaba alguien que pudiera mostrarle eso. Ser más espontanea. Él era su primer amigo. Era su deber mostrarle cómo se vive.

-Lo siento, no debí decir eso -le dijo apenada

-Buscaremos el sentido de la vida -le dijo Bradley

-¿Qué? -le contestó confundida

-Lo que te falta es vivir, Amelia. No has vivido como los otros jóvenes de nuestra edad. No digo que nos emborrachemos y salgamos a fiestas, a lo que me refiero es a que debemos vivir experiencias diferentes. Como lo de hoy -le explicó

-Es que me cuesta mucho. No estoy acostumbrada -le dijo aun frustrada -soy rara

-No lo eres. Solo eres algo tímida -le aseguró -pero míranos ahora. Somos amigos, se nota que ya has entrado en confianza conmigo o no me dirías estas cosas. Esos es lo que hacen los amigos, confiar el uno con el otro

Amelia no se había percatado de eso. Era verdad. Si hubiese estado en otra situación jamás le habría dicho algo así a una persona. Este chico estaba teniendo un efecto sobre ella. Le entregaba confianza sin darse cuenta. Pero él sí lo notaba.

-Creo que estoy aprendiendo a confiar en las personas -le dijo con una sonrisa tímida -al menos en ti

-Me parece estupendo -le contestó con una gran sonrisa -o si no, no podría hacer esto

Le quitó el gorro que tenía puesto y comenzó a correr.

-¡Bradley! -le gritó Amelia y se echó a correr tras él.

Este chico de verdad que está loco pensó

................................................................

Es corto, pero espero que les haya gustado :)

Me hicieron una entrevista por haber ganado un concurso. Los invito a leerla por si quieren saber algo o mas de mi :)

http://pixanart.esy.es/articulos/frozen-strings.html