AFTER DARK | PAUL LOHOTE - TRADUCCIÓN

05

El suelo se había convertido en algo bastante interesante para mirar desde que llegué al hospital. Parecía que Bella estaba decidida a no dejar mi lado mientras dejaba su propia cama asignada para sentarse en la mía a mi lado en la sala de emergencias.

Ella estaba en mejor estado que yo, tenía la capacidad de hablar. ¿Yo? No podía, sin importar lo mucho que intentara forzar las palabras alojadas en mi garganta. Mis manos temblaban en mi regazo y tomó una gran onza de control para evitar que temblaran. No entendí La furgoneta debería haberme golpeado, Tyler se precipitaba hacia mí, pero cerré los ojos en medio del estacionamiento y los abrí en el césped. ¿Cómo funcionó eso?

El sonido de la voz de mi padre en la sala de emergencias llenó mis oídos, –Tú y yo vamos a hablar–. Lo escuché decirle a Tyler mientras se acercaba a nosotros, –Chicas, ¿están bien?

–Estoy bien papá, cálmate–. Bella habló a mi lado mientras la enfermera le tomaba la presión arterial.

–¿Qué hay de ti, Soph, estás herida?

Sin dejar de mirar al suelo, negué con la cabeza mientras algo se apretaba alrededor de mi bíceps derecho. Bella respondió de nuevo, –Creo que sí, no ha hablado desde el accidente.

–Lo siento chicas, traté de parar–. Tyler habló desde detrás de nosotros.

–Lo sé, está bien–, respondió Bella a Tyler, –Estamos bien.

–No. Seguro que no estuvo bien–. espetó Charlie.

–Papá, no fue su culpa–. Bella lo defendió.

–Las dos podrían haber sido asesinadas, ¿entiendes eso?

–Sí, pero no éramos tan...

–Puedes despedirte de tu licencia–, escuché que Charlie le decía a Tyler.

–Escuché que las hijas del jefe estaban aquí–. Una nueva voz llamó a través de la habitación del hospital.

–Oh, Dr. Cullen– saludó Charlie.

–Charlie–. Él asintió mientras se volvía hacia la enfermera que estaba revisando mi ritmo cardíaco, –Yo me encargo de estas dos Jackie–. La mujer, Jackie, aparentemente asintió y se alejó mientras el médico agarraba un portapapeles y miraba las notas, –Sophia e Isabella–. Él dijo.

Obligé a mis ojos a levantar los ojos del suelo laminado limpio mientras Bella le corregía su nombre. Parecía muy joven para ser médico, alrededor de los veinticinco años. Tenía la piel pálida y el cabello rubio corto que estaba peinado en la parte superior de su cabeza, vestía una camisa azul pálido con botones y una corbata un tono más claro a juego. Sus ojos eran cautivadores cuando se encontraron con los míos, lo único similar que compartía con su hijo eran sus ojos.

–Bueno, chicas, parece que se han golpeado bastante, ¿cómo se sienten?–, nos preguntó.

–Me siento bien–, mi hermana asintió, –Estoy preocupada por Sophia. Ella no ha dicho nada desde que sucedió.

El Dr. Cullen se giró para mirarme, –¿Te sientes bien, Sophia?

Asentí como respuesta.

–Míra aquí, por favor–. Dijo el Dr. Cullen, levantando su dedo para que yo lo siguiera mientras tomaba una pequeña linterna. Seguí su dedo mientras él encendía la linterna en mis ojos, –Creo que es sólo un shock, es común en la mayoría de las personas después de experimentar accidentes, traumas–. Se acercó a Bella e hizo lo mismo, –Hablando de eso, es posible que experimentes algo de estrés postraumático o desorientación, pero sus signos vitales se ven bien. No hay signos de ningún trauma en la cabeza. Creo que estarán bien.