Capítulo 16: Rocketship

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                        Audrey

No entendía la razón por la que la profesora había elegido a Duff si ni siquiera pertenecía a esta clase. Además, no sabía moverse tan bien. No es que sea una experta, pero era lógico que le costaba un poco soltarse; me daba cuenta de eso, pues la profesora le enseñaba pero él estaba rígido: necesitaba relajar los músculos. Lo bueno de esto es que era una persona que retenía muy rápido los movimientos de manera mental.

Por ser los principales en este bailable, era esperado que tuvieramos contacto en pareja para realzar el protagonismo.
Nos habían puesto frente a frente tomándonos de una mano en posición de vals mientras que la profesora le enseñaba que con la otra tenía que tomarme de la cintura.

—Tómala bien, sin miedo.

Él hizo caso a las órdenes y se acercó más a mi cuerpo. Tenía que aceptar que para este punto yo ya estaba nerviosa de la forma en la que me tenía y en la forma en la que podía ver a través de sus ojos verdes.

—Tu respiración está un poco acelerada —me susurró al oído.

Sin pensar en lo que diría, reaccioné apartándome inmediatamente. Lo miré por un momento y lo primero que se me ocurrió fue fingir que tenía mucha sed e ir por agua.

Esto iba a ser más difícil de lo que imaginaba. Estar tan cerca de él iba a imposibilitar que lo olvidara. Me daba cuenta que él tenía el control de mis emociones y me paralizaba cada vez que lo veía. Pero eso ya no tenía que ser así y tampoco quería que lo fuera. No merezco seguir sufriendo por alguien a quien no me corresponde ese amor.

—Bien muchachos, nos vemos la siguiente semana. Hemos arrancado bastate bien y ya avanzamos. Descansen y nos vemos con más energía.

Fui por mis cosas para acomodarlas y así poder retirarme. Sin embargo, antes pasé al baño para poder cambiarme la ropa que estaba totalmente mojada en sudor. Al salir, me topé con Duff en el patio esperando a Jamie, quien había ido a control escolar a verificar un asunto directamente con ellos.

—¿Qué tal lo hice? —mencionó riéndose, como si se estuviera burlando se sí mismo —Soy el mejor bailarín —ambos reímos.

—Deberías quitarle el lugar a la profesora —reí y después me puse seria —¿Por qué decidiste estar?

—En realidad ella fue la que me insistió a pesar de que le dije que tenía dos pies izquierdos. Por lo que veo eso no le importó, pero, te seré sincero, creo que puede ser divertido. Además, no estaría solo... estaría con una amiga. —ambos nos quedamos en silencio por un momento, hasta que decidió romperlo —Oye, tenemos que ir a The Grove. Es un centro comercial muy padre que te puede gustar. ¿Puedo pasar por ti hoy?

—¿Hoy? —hice un gesto, pues tenía la salida con Nikki —Lo siento, tendrá que ser para después. Tengo un compromiso esta noche.

Él asintió y lo entendió sin preguntar nada más.

Al llegar a casa, aproveché el tiempo para comenzar a buscar la ropa que me pondría, para después darme una ducha.

Comencé a arreglarme. Me había puesto unos jeans y una camiseta con unos tenis tipo botines.

Acabé antes de arreglarme que procedí a dormir un rato en lo que llegaba la hora para que Nikki llegara por mí.

Cuando dieron las 6:30 de la tarde me desperté de golpe al escuchar que unas voces, que provenían de la sala, estaban hablando.

Al ir bajando poco a poco las escaleras, me percaté que las personas que hablaban era mi papá con Nikki en la entrada de la puerta. Me daba un poco de vergüenza que así fuera, pues me daba pena que mi papá le dijera algo fuera de lugar.

—Veo que ya despertaste. Alguien vino a verte. —miró a Nikki.

—Hola Nikki. Lo lamento, me había quedado dormida un rato. —miré a mi papá para hablarle a él —Iremos al cine, volveremos más tarde. —tomé las llaves de la casa y abrí la puerta.

—Váyanse con cuidado. Y cuídamela, Nikki. Nada de desviarse a otro lado.

—¡Papá! —lo miré y regañé para que dejara de incomodarnos —Vámonos—tomé  a Nikki del brazo para llevarlo a la puerta de inmediato.

—Hasta luego señor, un placer. —dijo alzando la voz, ya que yo lo estaba llevando a la salida.

Me disculpé con Nikki por mi papá que a veces solía ser un poco imprudente. Eso no parecía molestarle, al contrario se estaba riendo y parecía ser divertido para él.

Ya nos íbamos a subir al auto cuando me dijo que tenía algo para mí. Eso era algo sorprendente, pues no me esperaba que Nikki fuera a darme un detalle.
Sacó una cajita forrada dentro de su chaqueta de cuero y me la entregó esperando que me gustara. Al abrirla, tenía ganas de llorar de la nostalgia y por lo inesperado que había sido. Era un collar pequeño que tenía un dije de edificios característicos de Nueva York junto con la Estatua de la Libertad.

—Es para que lleves contigo tus raíces y ese bonito recuerdo de tu hogar.

Jamás nadie me había dado algo tan significativo. Nikki había sido el primero, pero nunca pensé que él fuera quien me daría algo así. Y sentí bonito. Me sentía especial sin poder describir la emoción que estaba teniendo.

Nikki tomó el collar y se puso atrás de mí para poder ponermelo. Recogí mi cabello y lo puso. Se veía hermoso verlo en mi cuello.

Era tanta la emoción que estaba sintiendo que cuando me lo puso, me giré y me lancé contra él para darle un fuerte abrazo agradeciendole por el pequeño detalle que para mí valía millones.

Después de ese largo abrazo, nos dirigimos al coche que Mick nuevamente le había prestado.

Al llegar al cine, fuimos por palomitas y refrescos. Sinceramente estaba nerviosa porque las películas de terror me daban miedo y más si las veía en las noches. Cuando eso pasaba, mi mente se creaba alucinaciones a la hora de dormir y se volvía una tortura. Solo esperaba que después de esto no me arrepienta.

Entramos a la sala y elegimos los asientos que estuvieran a la altura de la pantalla.

—Nikki, tengo que confesarte algo. —se acomodó de su asiento y me comenzó a mirar fijamente —Las películas de terror no son mis favoritas, me dan miedo.

—No va a pasar nada, yo estaré contigo. Pero si quieres podemos salir de la sala e ir a otro lado.

—Pues...ya estamos acá. Seré fuerte.

Comenzó la película. Era una película de un hombre que decide remodelar su casa de Nueva York pero se encuentra con una plaga de ratones. Sonaría estúpido pensar que puede ser una película de terror sin fantasmas, pero el film juega con sus elementos para someter al terror psicológico.

Había veces en las que sí me tapaba los ojos o que no podía con la ansiedad que me generaba. Era tanto el miedo que no me percaté que  él me estaba abrazando, pues tenía su mano sobre mi hombro.

—¿Qué te pareció? Espero puedas dormir —rió mientras caminábamos por los alrededores.

—Ojalá y sí —reí y crucé los brazos para darme un poco de calor, ya que había un poco de frío.

Nikki me vio temblar un poco que se comenzó a quitar la chaqueta para después ponermela para taparme y así cubrirme.

—Te vas a morir del frío. Tienes una playera sin mangas —mencione preocupada.

—No importa, yo si puedo aguantar. Además, quiero que estés bien.

Nikki se había comportado muy lindo conmigo esta noche y eso significaba mucho para mí.

Había sido excepcionante; fue una salida maravillosa que me había traído paz y mucha tranquilidad después de mucho tiempo. Eso era bueno para mí, porque desde que llegué a L.A muchas cosas negativas y malos ratos tenía, a pesar de que tenía muy buenas compañías a mi lado.

Al llegar a casa nuevamente, Nikki me acompañó hasta la puerta. Estaba por devolverle la chaqueta, pero él insistió en que me la quedara, que se la podía regresar después.

—Gracias por todo, Nikki. Me la pasé bien.

—También me la pasé increíble. —sonrió —Estaría bien que se repitiera.

Me miró fíjamente por un largo tiempo hasta que se despidió de mí diciendo que me vería después; pude sentir el cuero de su guante al tomar mi rostro y acercarse suavemente para besar una de mis mejillas. Se apartó de mí sonriéndome mientras caminaba hacia atrás sin quitarme la mirada hasta que finalmente se dio la vuelta para digirse al auto.
La despedida parecía ampliarse, pues estando en el auto se despidió con un saludo de mano. Arrancó el auto y me sonrió una última vez hasta que lo vi alejarse del camino.

Shadow Of Your Love / (Duff Mckagan Y Nikki Sixx) Where stories live. Discover now