Capítulo 8

11.5K 1.1K 327
                                    

<< Tell me why de Taylor Swift >>

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

<< Tell me why de Taylor Swift >>

Capítulo 8

Ryo

Vivir en el mismo edificio que Autumn ha sido una sorpresa y de las bonitas. Más, viendo cómo es su carácter, no creo que ella piense lo mismo. Seguro que estará pensando algo como: El universo me odia.

Más lo extraño de la situación es ¿cómo no nos hemos dado cuenta antes de que éramos vecinos?

Es cierto que en una urbanización no te acuerdas de todas las personas que conviven juntas, pero sí dentro de tu mismo edificio o lo que es más fácil acordarse de las que están en el mismo piso. Y más aún cuando es una chica tan atractiva y destaca tanto entre la multitud.

Pero no, nunca la he visto. He cruzado este pasillo miles de veces y nunca me he cruzado con ella. Ni cuando mis hermanas me sacaban de casa para llevarme al parque, ni cuando mi madre me ha llevado a partidos cuando era pequeño, ni en estos años de universidad. Es cierto que ambos entrenamos, y no creo que nuestros horarios sean tan distintos. Tampoco parece que tengamos estilos de vida diferentes. Sin embargo, nunca hemos tenido la interacción que en estos últimos días.

—Esto debe ser cosa del destino. —Dejo las llaves en mi cuarto y voy a preparar la lavadora con la ropa de la equipación y con los pantalones del chándal.

Luego, me percato de que me faltan la sudadera y la chaqueta.

Exacto, las tiene el tomate cherry que tengo por vecina.

Debería pedírsela a Walsh para poder poner toda la indumentaria junta.

Regreso a mi cuarto y vuelvo a tomar las llaves para poder volver a entrar en casa más tarde. Salgo al hall del piso, doy cuatro pasos para encontrarme justo con la puerta A y llamo al timbre.

Solo voy a pedírselo de manera educada con una sonrisa como siempre.

Escucho el tintineo de las llaves al otro lado de la puerta y cuando esta se abre, no puedo creer lo que ven mis ojos.

Estoy siendo bendecido otra vez.

Ella se encuentra frente a mí en toalla. Las gotas de agua que gotean por las puntas de su cabello caen sobre sus hombros, llegando a sus brazos.

Dios.

Tienes una flor en el culo.

Sí, desde luego tengo la suerte de mi lado.

Ella abre la boca, sin siquiera decir nada. Lo más probable es que esté maldiciéndome por dentro.

Hago un gesto con la mano, con la intención de hablar, de saludar.

Recibo un portazo antes de llegar a articular palabra alguna.

Pero si aún no he hecho nada malo.

Pestañeo varias veces, y me froto los ojos.

HASTA QUE FINALICE LA PRIMAVERA.Where stories live. Discover now