Capítulo 15

9.3K 919 621
                                    

<< Message in a bottle de Taylor Swift >>

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

<< Message in a bottle de Taylor Swift >>

Capítulo 15

Autumn

Al subir el último escalón de las escaleras que conducen al lugar que tantas ganas tengo de ver, acelero el paso lo más pronto posible. Observo un largo sendero de tablillas de madera. Y veo a varios animales rojizos en los troncos de los árboles y en las ramas.

—Por fin, por fin estoy viendo pandas rojos. —Digo en alto.

Siempre he querido verlos de cerca. Porque la única vez que los vi fue en un documental de la televisión, uno de esos tantos de National Geographic. Y en dibujos animados en la película de Red.

—Ryo, al fin, estamos...

Cuando me giro compruebo que no está detrás de mi.

¿Ya nos hemos separado? 

«Él es mucho más alto, no creo que tenga problema en encontrarme.»

Vuelvo a enfocar mejor la vista entre los árboles y en las lianas para poder ver mejor a los animales.

La gente a mi alrededor arma algo de ruido con sus expresiones de sorpresas, con los clic de las cámaras o de sus móviles.

Los animales van saltando de árbol en árbol, algunos otros corretean de aquí para allá en el mismo suelo verde, o incluso por encima de las tablillas de madera que forman el sendero en que estoy.

Mi mirada se desplaza de un lugar a otro, intentando ver uno de estos animales más de cerca. Me termino dando por vencida y de repente, un pequeño ladrido suena muy cerca, obligándome a alzar de nuevo la vista. Entonces, veo como una bola de pelo rojiza está dando un salto con los brazos abiertos.

Un panda rojo. Sí, es un panda rojo.

«¿Sabe volar?»

Extiendo los brazos para poder agarrarlo y que no se machaque contra el suelo.

Me muestra su fila de dientes. Con esa expresión, no sé si me va a morder o es su manera de agradecerme.

No pasan ni diez segundos, este pega su cara a uno de mis mofletes y comienza a frotarse con suavidad.

—Ya veo, así que quieres mimos. —Lo abrazo, procurando no aplastarlo.

—Parece que le gustas. —Esa voz, cambio de plano la mirada y ahí está él, el capitán de natación de mi universidad—. Normal, a cualquiera le caerías bien.

Abro los ojos, sorprendida por encontrarlo aquí.

—¿Cómo es qué estás aquí?

Es posible que sea una simple coincidencia. No obstante, es demasiado extraño. Conozco a Linus desde hace mucho tiempo y él aprovecharía hasta los fines de semana para entrenar y mejorar su marca. Y aún más siendo el capitán de natación, sin añadir las broncas que le caen por aparte de nuestro entrenador por no conseguir ser más eficiente como capitán. Además, sé de otros alumnos de segundo y tercero que podrían ser candidatos a capitán por su buen estilo de nado y técnica que tienen.

HASTA QUE FINALICE LA PRIMAVERA.Where stories live. Discover now