Mi Esposo Es Un Billonario (Parte 1)

Capítulo 128

Las ojeras de Ethan demostraban lo cansado que estaba. Cuando vio salir a su esposa de la habitación, parpadeó nervioso.

Sosteniendo la bolsa de papel con comida, pronunció vacilante: "Vamos a desayunar".

Repentinamente, Janet sintió un nudo en la garganta.

Era muy evidente que el joven había estado esperándola durante toda la noche.

En ese momento, la chica bajó la cabeza, intentando ocultar los sentimientos encontrados en su mirada.

"Puedes ir a comer solo", comentó con indiferencia, sacando la tarjeta de la habitación y cerrando la puerta.

A decir verdad, ella aún estaba sumamente enojada con su esposo. Ver que él había esperado afuera de su puerta solo la había disgustado más. "Señor Larson, no te interpongas en mi camino, ¿está bien?".

La verdad era que Ethan le había ocultado su verdadera identidad. En pocas palabras, la había engañado.

¡Toda la situación era tan absurda! A ella ni siquiera le importaba si era la esposa de Ethan o de Brandon, puesto que eran la misma persona. Sin embargo, ¡lo que sí le importaba era que él no confiaba en ella y le había mentido!

Si ellos simplemente hubiesen sido amigos o completos extraños, hubiese estado bien que el joven ocultara su identidad secreta como Brandon. No obstante, ellos eran una pareja que vivía bajo el mismo techo. Ethan nunca había considerado los sentimientos de la mujer.

"Janet, ¿podríamos tomarnos un momento para conservarlo?", con el brazo en la puerta, el hombre bajó la cabeza y parecía querer decir algo, sin embargo, frunció el ceño, como si algo se le hubiese quedado atascado en la garganta.

Sin contestarle nada, la chica miró hacia otro lado, pasó junto a él y se marchó.

Por su parte, Janet caminó por las calles sin rumbo fijo, rodeada de multitudes de personas.

Al llegar a una agencia de alquiler, estaba dudando.

"Señorita, ¿busca alquilar una casa? Sígame, tenemos muchas casas buenas que se ajustan al presupuesto de cualquiera". En ese instante, un agente abrió la puerta y saludó a Janet, con una sonrisa dibujada en su rostro.

Al escucharlo, la joven vaciló, preguntándose si debía encontrar su propio apartamento.

De hecho, ya no podía vivir en la villa de Ethan. La simple idea de regresar a ese lugar la hacía sentir furiosa.

Su esposo le había ocultado un montón de cosas. ¡Definitivamente era un mentiroso!

Sin embargo, la chica no ingresó a la agencia de alquiler. Sus cosas todavía estaban en la villa, por lo que tenía que volver a buscarlas primero.

En cuanto a su empleo en el Grupo Larson, Janet no estaba de humor para trabajar en absoluto. A decir verdad, su mente era un completo desastre. Por lo tanto, le envió un mensaje de texto a Tiffany y le pidió un permiso.

Aparte de todo eso, muchos altos ejecutivos de la compañía ya se habían enterado de su relación con Brandon el día anterior, así que ella no estaba de humor para enfrentarlos.

Abrumada, la joven llamó a un taxi y regresó a la villa para empacar sus cosas.

Sin esperarlo, se encontró con Laney en la puerta de la villa. Sentada en los escalones de afuera, esta última se levantó de inmediato cuando se dio cuenta de que la otra se acercaba.

"¿Por qué no fuiste a trabajar hoy? Estaba muy preocupada por ti, Janet".

De hecho, la preocupación de Laney era genuina. Ella se había enterado por Garrett de que la identidad de Ethan había sido revelada, así que de inmediato fue a ver a Janet. Sin embargo, esta nunca llegó a casa, ni respondió a sus llamadas telefónicas. Entonces, Laney se conformó con esperarla allí.