La felicidad "sexual" de Beta en el mundo ABO

Capítulo 18: Hermano - Masturbación en Omega masculino

¿Qué quiere?

¡Quiere a su hermana!

Le gustaba su hermana desde que era un niño y era muy apegado a ella, pero nunca pensó en tener otra relación con su hermana que no fuera la de hermanos. Pero desde que supo que su hermana mayor no era su propia hermana mayor, de repente tuvo la idea de no dejar que su hermana lo dejara o se fuera de casa. Esta idea fermentó en un instante, siguió a su hermana al dormitorio y le dijo que la amaba con un juego de palabras.

Ella también lo amaba, pero ahora lo amaba como el amor a su hermano. Lo que anhelaba era que además del amor entre hermanos, hubiera amor entre hombre y mujer. Es un Omega, pero sigue siendo un hombre, y su órgano masculino sano y completo le permite ser un esposo.

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Debajo del cabezal de la ducha en el baño más interior, Oscar se lavó la parte inferior del cuerpo. Los hombres omega, al igual que los hombres beta, tienen dos conjuntos de órganos, masculino y femenino, el pene y los testículos masculinos en el exterior y la vagina femenina oculta en el interior y unida al recto. A menudo trabaja como voluntario en su propia clínica y también ha visto los órganos sexuales de machos y hembras Beta, y su pene no es más pequeño que el de los machos Beta.

Su hermana era una mujer Beta, y él podía satisfacer sus necesidades físicas si ella lo aceptaba.

Abriendo el prepucio y limpiando a fondo el palo de carne, Oscar agarró su suave palo de carne y lo deslizó arriba y abajo. Después de siete u ocho golpes, su palo de carne estaba hinchado. Tomando una medida aproximada con la mano, estimó que su palo de carne tenía unos quince centímetros de largo cuando estaba erecto. Esta longitud es un tamaño mediano entre los machos Beta.

Mientras el agua caliente bañaba su cuerpo, agarró su palo de carne y lo deslizó hacia arriba y hacia abajo. Era la primera vez que hacía tal cosa, y estaba un poco preocupado.

Hermana, hermana...

Los delicados y tiernos rasgos faciales de la hermana mayor, una figura exquisita y sobresaliente, aparecieron en su mente, y Oscar sintió que su cuerpo se calentaba más.

Hermana, hermana... Hermana Merlín, Merlín...

"Merlín..." Oscar gritó en voz baja, respirando aceleradamente con el rostro hacia arriba, y los movimientos de sus manos se fueron acelerando poco a poco. Una sensación de hormigueo nunca antes sentida en la palma de su mano y en el eje de su carne, se extendió rápidamente por su coxis y su columna vertebral.

"Uh... uh... Merlín, te amo, te amo..." murmuró Oscar, su rostro elegante y tierno estaba sonrojado, sus ojos claros como el cristal y húmedos se desdibujaron gradualmente, el sube y baja no muy pronunciado de la garganta y la subida y bajada violentas del pecho blanco.

El hormigueo del placer se hizo cada vez más intenso. Como estudiante de medicina, sabía lo que quería, así que sostuvo su palo de carne firme y caliente con fuerza y lo acarició con rapidez.

Lla ducha roció agua, haciendo un sonido de chapoteo, cubriendo sus bajos murmullos.

"Oh... oh... ss... Merlín, Merlín..." Oscar miró hacia arriba e imaginó que Merlín caminaba hacia él con gracia, sus ojos oscuros lo miraban con cariño, y su boca roja brillante decía claramente: Te amo, Oscar.

Oh, Merlín, Merlín, estaremos juntas para siempre. Te amo y quiero ser un hombre Beta para ti, ser tu hombre, tu esposo.

El palo de carne de Oscar, de diecinueve años, estaba tieso y largo. Acarició cada vez más deprisa mientras el líquido transparente empezaba a manar del orificio central situado en la parte superior de la carne rosácea y púrpura con forma de seta.

"Merlín... te amo. Oh... te amo, Merlín, mi Merlín..." Oscar gimió excitado, jadeando fuertemente, su apuesto rostro joven se crispó ligeramente.

"Ah, ah... oh... Merlín, oh... Merlín. Ah, ahh—" Levantó la cabeza y gruñó, su mano sujetando con fuerza su palo de carne se movía hacia arriba y hacia abajo tan rápido como un relámpago. El placer fuerte y sofocante de repente se precipitó a lo largo del coxis, su cerebro se quedó en blanco por un instante, su cintura y sus ojos estaban entumecidos, y el palo de carne se sacudió dos veces antes de estallar repentinamente un chorro de semen blanco espeso.

"Oh... oh... oh..." Oscar sostuvo su palo de carne eyaculatorio y continuó acariciando, mirando emocionado su eyaculación golpeando los azulejos de la pared uno por uno. ¡Es un hombre sano y tiene semen!

Oscar acarició su palo de carne con confianza.

"Oscar, ¿qué te pasa?" La puerta corrediza de vidrio del baño que conducía a la habitación de Merlín se abrió de repente, y Merlín, que escuchó los gritos adentro, miró nerviosamente a Oscar que todavía se estaba duchando debajo de la ducha. Sujetaba su propio palo de carne, que no sólo estaba erecto, sino que además chorreaba un pequeño chorro de mucosidad blanca por la punta.

¡Masturbación, eyaculación!

Merlín estaba estupefacta. Oscar, que aún no tiene veinte años, ¿va a entrar en celo?

Oscar, con el rostro sonrojado, miró torpemente a Merlín, quien entró corriendo, su palo de carne erecto se ablandó rápidamente.