Capítulo 22: Que divertida es la ciencia

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Ya se han acabado las vacaciones de verano y es hora de volver a la escuela. Algunos ansiosos otros no.

– Ya se acabaron las vacaciones. Fueron muy entretenidas –camina animada junto a sus amigos.

– Yo diría interesantes – comenta Luis.

– Sí – afirma Marco – es bueno volver.

Aparece Carmen alzando la voz mientras le contaba a un grupo de chicos como habían sido sus vacaciones.

– Verán, fui al reino del verano y estuvo genial. Luego al de la diversión y al final fui con la princesa del reino Starlight a la playa.

– Eso último no me lo creo – les susurra.

De pronto, todos se quedan callados. Voltean y ven a Smile entrando a la institución. Que sorpresa más grande al ver que se acerca a Marco y Luis con una sonrisa.

– Hola – saluda con entusiasmo con ambas manos a sus amigos – No saben lo feliz que estoy de estar aquí con ustedes.

– ¿A qué te refieres? – preguntan ambos.

– Me quedaré aquí hasta después de las vacaciones de invierno. Serán buenos meses antes de mi gira de primavera. Vamos, enseñenme todo – al ser bajita los abraza pasando sus brazos por sus cinturas incitandolos a que le muestren el lugar.

El resto perplejos observan como la dirigen a su salón.

En clase...

– De acuerdo a lo que vimos sobre la generación de energía a través de diferentes medios, tendrán que realizar una cosa similar. Deben reunirse en equipos. Lo quiero dentro de una semana.

A Smile la pusieron con otros compañeros lo cual dejó sin palabras a los miembros de su equipo.

Al salir de clase, los alumnos los rodean.

– ¿Desde cuándo se conocen? – pregunta Alan.

– ¿Son parientes? – pregunta Rick.

– ¿Cómo pueden ser parientes? – Carmen se abre paso a través de los demás – No se parecen en nada. Además, ustedes ¿qué tienen de grandioso? Son unos raros. Es como si fueran de otro mundo.

– No les digas así – llega en defensa – Ellos son chicos geniales y buenos.

– A ti te parecerán raros pero para nosotras son nuestros mejores amigos – aclara Daisy.

– Anina tiene razón – afirma Alan – Ambos son buenos. Nunca nos han molestado más bien somos nosotros quienes no hemos notado lo que ellas ven. Me disculpo por todo ese tiempo que los ignore.

– No tienes de que Alan – responde Marco.

Varios también lo sienten. Carmen se aleja sin decir más.

Es conmovedor.

Después de la escuela, recibe un mensaje Ed que debían ir al reino de la ciencia.

– Que mejor forma de inspirarnos para nuestra tarea – dice Daisy.

***

Los recibe una jovencita de 12 años, la princesa Nora, junto con su nana Esbeidy.

– Bienvenidos, quería conocerlas princesas.

– Hola, ellos son nuestros amigos, Marco y Luis.

– Vengan les encantará conocer el reino – dice Esbeidy.

En todo el reino se ven muchas cosas interesantes, todo relacionado con biología, física y química. Llegan al castillo.

– Se ve tan innovador.

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