Mientras el viejo le cogia las tetas la chica mordía sus labios intentando ahogar sus gemidos de auténtico placer. En su vida se había imaginado que su primera vez fuese así. Y aunque estaba algo horrorizada de lo vulgar, obcesno y altamente morboso que era verse en esa escena, las manos del viejo hacían maravillas con sus pezones. Los jalaban y manipulaba entre las llamas de sus dedos. La muchachita nonpodia controlarlo y comenzaba a sentir fuertes deseos de tocar su vagina que estaba palpitando.
El viejo estaba obseso con sus tetas. Que no perdio tiempo para comenzar a pasar su lengua áspera entre sus delicados pezones.
La chica advirtió su reflejo en el espejo de la habitación y vio con detalle como el viejo abría la boca para chuparle las tetas. Era lo más oscuro, tórrido y perverso que jamas había imaginado. Y precisamente por eso la exitaba más.
Comenzó a sentir las magníficas chupadas de el viejo, como apretaba sus pezones, los mordisquear produciéndose cierto dolor pero que lamhacia gozar.
—Ahhhh.... dejó ir el aliento en un gemido. Y el viejo se la cogio por entre las piernas y se la llevó a la cama, la tumbo destacándose los pechos y mamandoselos con absoluto morbo.
La chica sabía que lo que le hacían era ilegal, pecaminoso. Casi sádico. Abrazo lamcabeza del viejo viendo sus delicadas y pequeñas manos al rededor de la cabeza canoso y escaza de pelo.
Entonces el viejo sabiéndose ya deseado. Comenzó a hurgar en su ropa interior. Llegó a su rojita y le fue metiendo el dedo.
—Ohhhh... gemia ella. El viejo la deseaba intensamente. Se para y le quito las pantaletas. Le separo las piernas y comenzó a repasar sus lengua en el coño.
—Ohhhh.... dios... noooo.. que me hace.... ohhhhh....
El viejo prosiguió con sus lamidas y sus secciones. La chiquilla estaba por demás caliente. Apretaba las piernas y a los ratos impulsaba su pelvis hacia arriba.
Comenzó a sentir las sensaciones de un pre orgasmo que la hizo comenzar a gemir sin reparo.
—Ohhhh... ohhhh... dios.... mordía sus labios. Se sentía ansiosa repasando su lengua por sus labios. Sus manos se aferraba a las sábanas.
—Dios.... siiii... ohhhh.... asiii.. siiii... ohhhh— la nena se sentía desesperada. El viejo se puso de pie otra vez y la miro con perversidad. Acaricio sus labios mormobosamente, la comenzó a besar sacudiendo su lengua epdentromde su boca mientras le hiba metiendo el dedo en la conchiq otra vez.
—Te gusta eh?
—Siii... ohhhh...
—Quieres chuparme la polla?
—Dios siii... —y ella misma comenzó a desabrochar su bragueta.
Salto entonces una na o de proporciones gigantescas.
—Dios.. es tan grande... la nena lo cogio entre las manos y comenzó a lamer la punta.
El viejo exitadisimo le dijo.
—Toda. Chupala toda.
Ella se puso de rodillas sobre la cama y se la comenzó q chupar mirando su reflejo. La escena era perversa.
Ohhhh ... gemia ahora el viejo. Apretandole el culo.
Eso es... chupa chupa chupa asiii.... ohhhh... te voy a dar tu leche hoy, y te la vas tomar todita... ohhhhhh...
La nena mamaba con una desesperación, alucina de escuchar las morbosidades del viejo.
—Ahhhhh... que bien chupas carajos!!! Como quisiera romperte el coñito.... ahhhhhh. La jalo del cabello. Y le,cogio la cara apretandomsus mejillas.
Que putita más deliciosa eres. Te voy a enseñar lo que es bueno.
Se tumbo en la cama y le dio indicaciones para que depositará su coño sobre su cara.
—Te lo voy comer mientras tu sigues mamando. Armaron un perfecto 69.
La nena gemia con la boca llena del placer que 3l viejomy su lengua le daban. Ohhhh.... dioses... que rico.... ohhh y siguo chupando hasta sentir un li1uido agrio, espeso caliente en su boca.
—Ohhhh.... tragueta traguetala . Y ella obedeció al tiempo que su orgazmo llegaba y la hacía vibrar. Susnpiernas temblaban y una marejada se vino sobre el viejo.
La chiquilla jamás había sentido semejante placer. Cayó agotada al lado del viejo con el coño chorreando.
El viejo aún recuperaba el aliento. Se volteo hacia ella y le Sacudió la concha con sus manos...
Buen coño. Buenas tetas... se sento a su lado y comenzó a mirarle el coño... otra día que vengas te lo voy a volver a chupar.
La nena asentaba con la cabeza mientras aún recobraba conciencia.
