Capítulo extra III

8.5K 560 361
                                    

Inglaterra, 2031
Lia

-Ethan, cariño. Te he dicho que no andes con el coche dentro de la casa, puedes lastimarte.

Apenas termino de decir aquello cuando mi pequeño de 5 años se estrella contra la pared.

Carlos le había regalado hace poco un cochecito eléctrico y no paraba de usarlo tanto fuera como dentro de la casa y eso había ocasionado que varios objetos estuvieran rotos ahora.

Ethan se gira viéndome con ojos tiernos y se baja sigilosamente del carrito.

-Lo siento, mami. No lo volveré a hacer- promete como las otras cinco veces pero se que ocurrirá de nuevo.

Niego riendo y me acerco con su traje de carreras para ponérselo.

-Ven acá, necesitas ponerte el mono porque ya es bastante tarde para ir a tu carrera.

Ethan se acerca corriendo emocionado y comienza a vestirse rápidamente.

-¿Papá irá?- pregunta ansioso.

Evito hacer una mueca para no darle inseguridad y solo me limito a mirarlo.

-Dijo que haría lo posible por ir, su avión se retrasó.

Y era verdad. Lando había tenido carrera en Monaco, pero hubo una tormenta bastante fuerte y los vuelos habían sido cancelados por precaución, y manejar no era una opción debido al peligro.

Mi pequeño asiente poco convencido y no dice más.

Termino de abrocharle su mono y dejo un beso en su sien mientras lo atraigo para abrazarlo, sintiendo sus bracitos rodearme fuertemente.

-Confía en papá, ¿Sí?- susurro para transmitirle confianza.

-Siempre- afirma con una sonrisa que me recuerda a su padre.

-De acuerdo. Ve por tu casco para que podamos irnos- Ethan asiente y sale corriendo a su habitación.

Termino de arreglar las cosas necesarias y me adentro a la cocina donde encuentro a mi otro pequeño de dos años con las mejillas manchadas y un bote de yogurt casi terminado entre sus manos.

-Alec, si comes demasiado yogurt te dolerá la pancita.

Mi pequeñito pega un brinco del susto y se gira a verme con ojos de gatito.

Igualito a su hermano.

-Tenía hambe, mami- se excusa con voz tierna que me hace acelerar el corazón.

Me acerco riendo y lo cargo para comenzar a limpiarle con una toallita y agua.

-Pero si comimos hace media hora, corazón- río y mi pequeñito ríe tímido, escondiendo su carita entre sus manos.

Alec era parecido a su hermano, solo que físicamente tiene rasgos míos y su cabello es lacio. Aunque su personalidad la había adquirido de su padre.

Y hay una diferencia muy grande en mis dos pequeños, y es que Ethan suele ser más travieso y extrovertido, y en cambio Alec es un poco más tímido e introvertido, pero cuando agarra confianza es demasiado tarde para controlarlo.

Ethan es más parlanchín y Alec más callado. Una dupla perfecta para equilibrar todo.

Me aseguro de limpiar cada rastro de yogurt de la carita de Alec e intento contener mi risa cuando noto sus ojitos cerrarse, apunto de quedarse dormido.

-Cielo, no te duermas, tenemos que irnos ya- le recuerdo, dejando un beso en su sien.

Mi pequeñito asiente y estira sus bracitos para que lo cargue.

Velocidad a Sets  •Lando NorrisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora