El desorden de ser Joven [+18]

7. la fiesta

Narrador

Esta primera semana de clases había sido sin duda alguna la más extraña por la que han tenido que pasar el grupo de amigos, la integración de Sadie a su pequeño grupo fue algo inesperado, pero aparentemente a todos a excepción de Kendall les agradó bastante, así que no fue muy difícil que la pelirroja se adaptara.

Finalmente era sábado por la noche, el momento de la fiesta había llegado.

Todos estaban en sus casas preparándose.

Cameron estaba frente al espejo peinando su cabello.

-ya está muy largo- dijo pensado en que debe ir a cortárselo urgentemente.

El pelinegro ya tenía en la cama la ropa que se pondría, un pantalón negro no muy pegado con una camisa Blanca manga corta y una chaqueta color verde oscuro muy costosa, escoger los atuendos siempre ha sido tarea fácil para Cameron, lo difícil para él era que su cabello quedará perfecto.

-adelante- respondió el pelinegro cuando alguien toco tres veces su puerta.

-permiso...

-¿qué quieres?- preguntó confundido, Sadie estaba mirando su cuarto sorprendida por el escritorio y aparatos gamer que tenía el chico, es la primera vez que entra- Sadie.

-ah si- dejo de ver las pantallas- oye... se que no nos la llevamos bien y eso... - dijo con pena- pero... Gisel no me contesta y necesito preguntarle a alguien...- traía ambas manos detrás de la espalda.

-cuentame- Cameron estaba intrigado.

-crees que debería ir a la fiesta en pantalón- saco un jean claro de su espalda- o en falda- saco una falta negra, los ojos verde veían al pelinegro con vergüenza y algo de esperanza.

Cameron no pudo evitar reír a carcajadas.

-¡es en serio!- le lanzó el pantalón a la cara.

-dios mio- el pelinegro se agarro la barriga, le dolía de tanto reírse- ¿me ves cara de asesor de moda?- le lanzó el pantalón de regreso.

-¡solo dame tú opinión!- su cara estaba muy roja.

-ponte cualquiera- volvió a la tarea de peinarse.

-gracias por nada, imbécil- la pelirroja le saco el dedo del medio antes de dar vuelta para salir de allí.

-¡creo que la falda estaría mejor! pero con lo que sea que te pongas estarás bien- le contestó Cameron en un tono de evidente fastidio.

Se escucho una dulce risa y un gracias desde el pasillo.

Cameron no pudo evitar preguntarse si así sería su vida de ahora en adelante.

Sería una pesadilla.

Él Nunca en su vida habia querido tener hermanos, mucho menos una hermana.

No le desagradaba del todo, pero tampoco estaba emocionado porque viniera alguien a robarle muchas de sus comodidades.

Sadie no le caía mal, aunque no podía negar que los rumores que habían de ella no hicieron que su relación mejorara.

Los hermanastros se conocían desde hace cuatro años aproximadamente, eran unos adolescentes apenas, y a esa edad es común que la gente nueva no les agrade, sus padres querían que se hicieran buenos amigos, pero presionaron tanto que termino siento lo contrario, así que desde ese momento nunca se la llevaron bien.

Cameron mientras empezaba a vestirse pensó "¿Quién rayos pide ayuda para vestirse?"

Mujeres, un hombre no haría eso, es tan estupido y...