14| Sentimientos encontrados.

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14| Sentimientos encontrados.

Aksel

Las semanas pasaron volando y en cuanto nos quisimos dar cuenta marzo dio paso a abril. Me di cuenta de ese cambio en cuanto el entrenador Davies nos convocó a Malcom y a mi para jugar en el próximo partido. Habíamos realizado las pruebas unas semanas antes y para nuestra sorpresa, nos acogió a los dos en su equipo.

Siendo sincero no me lo esperaba. No pensé que me cogería después de haber estado internado en un reformatorio, pero al parecer lo estaba esperando. Dijo que ya tardaba en volver a apuntarme al equipo y que me necesitaba más que nunca.

No pude evitar sentir como algo dentro de mí se encogía al volver a pisar el campo. Había sido mi segunda familia durante muchos años y volver ahí me llenaba de felicidad. No sabía lo mucho que lo extrañaba hasta ese día.

En cuanto se lo dije a Chase no pudo evitarlo y gritó en mitad del pasillo. Tampoco me esperaba esa reacción suya. Pensaba que no le iba a dar mucha importancia al asunto. Pero no pude evitar sentirme lleno en cuanto vi que se emocionaba por mí.

—¿Cuándo es el partido? —me preguntó, Chase. Iba mirando sus apuntes de historia. Teníamos examen justo ahora y se le notaba un poco nerviosa.

—El viernes. Después de las clases—la miré de reojo y me dio ternura como se concentraba en sus apuntes—. Chase no te comas más la cabeza— le quité sus apuntes mientras ella se quejaba—. Te lo sabes de memoria. Necesitas darte un respiro.

—El respiro lo tendré después del examen—intentó coger los apuntes pero le fue imposible por su estatura—. ¡Aksel!

No pude evitar no reírme. Era adorable verla cabreada.

—¿Quién fue el primer presidente de Estados Unidos?

—George Washington—contestó automáticamente.

— ¡Ves! Te lo sabes de memoria.

—Aksel eso no entra en el examen—me fulminó con la mirada—. Es cultura del país.

—Anda tira.

Entramos en la sala y nos sentamos en nuestros pupitres para dar paso al examen. La miré de rejo y vi que tenia la mirada fija en el examen. En cuanto el examen comenzó vi que no apuntaba nada. Se había quedado paralizada.

—Chase—susurré.

Le di una patada disimulada y me miró con cara de pánico.

— ¿Cómo que entraba la guerra de Independencia?

—Era el último punto de los apuntes—fruncí el ceño. —¿No te lo sabes?

Negó con la cabeza abrumada.

—Tenéis una hora para el examen—dijo el profesor, antes de tomar asiento en su silla.

—Chase relájate—le dije, sin que nos escuchase. Comencé a escribir en mi examen rápidamente al ver que no reaccionaba. Cinco minutos después ya había contestado a esa pregunta. Volví a mirar a Chase y la llame—. Chase, pásame tu examen.

Vi como fruncía el ceño.

—¿Qué?

—Tú confía en mí—le pedí.

Miró de reojo al profesor y me pasó su examen, al mismo instante que yo le pasaba el mío.

—Pon tu nombre en él—dije.

Puso los ojos en blanco al ver que había rellenado la pregunta por ella.

—¿Lo has hecho por mí?

Sonreí como un tonto al ver sus ojos brillar.

Somos Fugaces © ✔️Where stories live. Discover now