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Se conocían desde la escuela, desde que eran unos críos que no sabían lo que había fuera de casa pero no la pasaban nada mal estando juntos, siempre tenían cosas que hacer, ya sea en la escuela, en casa o etcétera, nunca se aburrían lo que era genial, al menos para Yoongi era muy entretenido ya que no tenía amigos para hacer esta clase de cosas, siempre se terminaban alejando cuando se introducian más en su vida. Lo que era una mierda por qué todos le miraban después por sobre el hombro. Por eso se sintió tan feliz cuando tuvo una primera amistad de verdad, algo que era real y que duraría para siempre si fuese posible, eran tan iluso algunas veces, pero en fin, aquello no era algo que le preocupaba ahora mismo. Aunque si se molestaba un poco cuando le emparejaban contigo, no le gustaba para nada eso, no te veía como para tener nada romántico y eso ya te lo había mencionado y habías estado de acuerdo con ello, así por esa parte ambos sabían que no pasaría nada entre ustedes más que solo una amistad de amigos y la cual quería seguir manteniendo.
Quizás fue duro diciendo eso pero la verdad no le importaba, además porque tú estabas igual; no veías a Yoongi más que un muy buen amigo y eso le alegraba muchísimo. Bueno, como sea, quería dejar de pensar en ello pero se le había hecho inevitable cuando un compañero un poco insoportable a su criterio personal le habia dicho que se besara contigo solo por qué los habia visto muy juntos, estuvo a punto de golpearle porque ya estaba bastante harto de esos comentarios, pero no pudo lograrlo ya que le habías detenido de hacer ello. Suspiro fuerte y se trató de calmar. Era idiota que la gente automáticamente piense que, por qué alguien tiene una amistad muy de estar cerca, piensen que se mantiene una relación amorosa. Malditos idiotas, pensó Yoongi muy enojado.
—Esta bien, ya paso. —le ayudaste a calmarse.
—Si, pero aún así no deja de molestarme que siempre digan esas cosas. Siempre es lo mismo con estos imbéciles.
Cuando Yoongi se enojaba era mucho de maldecir a la gente, él sabía que eso estaba mal porque no todos tenían la culpa de lo que sea que había pasado, pero aún así era algo que no podía evitar por más que ya lo haya intentado. Al menos contigo evitaba serlo, no quería hacerte sentir mal o triste por algo que dijera o hiciera, así que se preocupaba de que todo ese enojo fuera dirigido a esa persona y hacia ti. Cuidaba mucho de su amistad y no quería que nada ni nadie la arruinara. Suspiro fuertemente para después voltear a verte y sonreír levemente al ver que tenías una sonrisa también en tu rostro, eso de cierta manera le calmo bastante. El día transcurrió un poco estresante para Yoongi, solo quería irse a casa y dormir toda la tarde pero te había prometido salir en la noche a ver una película que tanto querías ver al cine, así que se preparó y perfumó para luego salir de su casa rumbo a la tuya, pero le extraño mucho verte frente a la plaza que había delante de tu departamento sobre uno de los juegos para niños mirando hacia tus pies.
—¿Eh? ¿Que haces aquí? —se acerco a ti con preocupación. —¿Sucedió algo en casa?
Negaste sin mirarle. Yoongi no sabía que pasaba y eso le llamaba aún más de preocupación por qué tampoco decías nada. Se puso de cuclillas frente a ti viéndote fijamente esperando a que hablaras, tampoco quería presionarte a hacerlo si no querías, él era muy respetuoso y paciente, sobretodo contigo. Tenías toda su paciencia y atención.
—Tengo algo que decirte, Yoongi.
—Y puedes hacerlo, prometo que sea lo que sea no te juzgaré ni nada. Confía en mí. —Sonrió.
Estaba asustado, no sabía que era lo que pasaba, solo podía esperarse lo peor como por ejemplo que ya no querías seguir con su amistad, que ya te habías aburrido de él. Siempre todo para Yoongi terminaba mal, pero confiaba en que no sería nada de lo que preocuparse, nunca le habías dicho nada que le hiciera sentir mal o triste y eso es lo que le gustaba de la bonita amistad que tenían. Se puso frente a ti pero ahora de pie, extendiendo su mano para que la tomarás y le siguieras a caminar por ahí, pero no lo hiciste y eso fue lo que más asustó a Yoongi. Quizás había hecho mal de lo que no dió cuenta antes y en ese corto lapso de tiempo en su cabeza pasaron todos esos momentos en dónde estabas junto a ti, pero en ninguno de ellos había pasado nada que arruinara la relación amistosa que tenía. Se detuvieron abruptamente, quedándose el uno con el otro mirándose directamente a los ojos; uno sintiéndose horrible por lo que haría y el otro no teniendo idea de lo que estaba pasando.
—De verdad que no quiero hacer esto pero ya no aguanto más, no puedo seguir ocultando esto de ti, no cuando eres tan bueno conmigo. —Sollozaste triste. —Me gustas mucho, Min Yoongi, me gustas desde que salimos la primera vez.
Y Yoongi quedo más que confundido y completamente decepcionado, además de un poco, bastante, triste por lo que acabas de decir. ¿Cómo que le gustabas? Su cabeza no paraba de pensar en las palabras que habías dicho anteriormente, solo quería salir de ahí y desaparecer de tu vida, quizás estaba siendo rudo al pensar de esa manera pero era la verdad. No quería hacerte sentir mal o algo, pero ya no sabía que hacer ni en qué pensar... Estaba perdido.
—Eh, yo... Yo lo siento muchísimo por eso, pero no te veo más que como una buena amistad, nunca te he visto de manera romántica y tampoco lo haré. Perdóname por favor.
Y supo que todo estaba acabado cuando te vio irte y desaparecer entre la oscuridad de la noche.
