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Tenían ya un tiempo que no se veían por cuestiones de trabajo; Yoongi quien estaba en el extranjero y por tu parte habias viajado a tu país natal ya que tu madre había empeorado con su enfermedad. Desde un inicio no querías separarte del pálido porqué, algo en tu pecho decía que sucederían cosas si regresabas a dónde naciste, pero después de que recibiste un correo electrónico se parte de tu hermano diciendo que prácticamente tú mamá ya estaba a punto de fallecer, no decidiste dos veces en tomar el primer vuelo para estar ahí a primera hora. Antes habías conversado con Yoongi por llamada, quien también pareció asustado por lo que podría suceder y que dejaría de lado todas sus actividades para acompañarte, pero rechazaste aquella oferta. No querías que tuviera problemas solo por qué te acompañó. Así que por más que te doliera, tuviste que decirle que no.
Transcurrieron un par de semanas desde que te habías ido de Corea, semanas las cuáles estaban siendo un infierno en vida; tu madre empeoraba con el paso de los días, cada vez subía más el precio de mantenerla conectada a una máquina para que pudiese respirar y también tu padre quien seguía siendo el violento hombre desde siempre. Nada estaba saliendo bien y tú estabas pagando por todas esas cosas. Todos los días, Yoongi te mensajeaba para saber cómo iba todo, diciéndote que si estabas segura de que si no querías que viajará a tu país, pero le mentias diciendo que todo estaba yendo bien solo para no preocupar de más a tu novio. Querías regresar a los brazos de la persona que te hacía sentir amada.
—¡Eres una maldita zorra inservible!
Un golpe llegó a tu cara, haciendo que llevarás tu mano hacia donde tu padre había golpeado. Así era desde que llegaste a la casa donde creciste, seguía siendo el mismo hogar violento que siempre habías recordado. Querías llorar, pero no te podías permitir que alguien te viese vulnerable, menos si era el hombre al cual debías llamar "Papá". La razón del porqué tu padre te golpeaba era por mero gusto o cuando llegaba borracho, sino eran tu hermanos menores o tu madre, eras tú, así que mil veces aceptarías recibir los golpes para que nadie sufriera. Lo único bueno que tenía ese día era que tendrías una video llamada con Yoongi y estabas muy feliz por eso, tenías unas ganas de decirle lo mucho que le extrañabas y de cuánta falta te hacía. Estabas tan inmersa en el teléfono que no te preocupaste de cubrir ese moretón que lucía tu mejilla y que por supuesto Yoongi no dejo pasar.
—¿Que te pasó? —fue lo primero que dijo cuando inició la llamada.
—¿Eh? ¿Por qué lo dices?
—Pues por ese moretón que tienes en tu cara. —estaba muy preocupado —¿Alguien te golpeó? ¿Alguien te hizo algo?
Y así transcurrió la llamada, entre preocupaciones por parte del pálido y negaciones por tu parte. Por supuesto Yoongi supo inmediatamente que algo estaba pasando y de lo que no querías decirle, algo en su pecho le decía que fuese a tu país para saber que era eso que le tenía tan intranquilo. Había recordado esa vez en dónde le contaste los malos tratos que tú padre tenía contigo, dónde te golpeaba y maltrataba, eso hizo que los cables conectarán y temió por tu vida. Habló con quien fuese para que le dejasen viajar, era un caso de emergencia así que rápidamente aceptaron lo que pedía. Tomó el último vuelo que había hasta tu país, aunque se demoró un poco por qué el clima en el país de escala no era muy bueno. Estaba desesperado, sabía que con el transcurso de las horas peor lo pasabas y sus pobres uñas sufrían por eso, además de que nadie le decía nada, a pesar de que era alguien famoso no tenía alguna respuesta de siquiera el piloto del avión. Estaba enojado, muy enojado. Así fue hasta después de unas horas, finalmente se subió al jet que lo llevaría directamente hasta la ciudad donde vivías.
Esperaba que estuvieses bien, que cuando llegase a tu casa estuvieras sana y salva. El chófer rápidamente lo llevo y, una vez bajo del auto pudo oír gritos provenientes del interior del hogar. Corrió mientras te llamaba, pero sus nervios aumentaron cuando no recibia respuesta por tu parte, hasta que supo del porqué de eso; un hombre mayor que suponía que era tu padre, te tenía en el suelo de la cocina, golpeandote una y otra vez con una correa.
—¡No sirves ni siquiera para cuidar a la estúpida de tu madre! ¡Eres un pedazo de mierda inútil!
Yoongi sin pensarlo se abalanzó contra el hombre, empujándole y devolviendole un par de golpes, estaba cegado por el enojo que sentía. Se acercó a ti cuando el tipo se alejó un par de pasos, miró tus brazos llenos de moretones al igual que tus piernas, eso hizo que el enojo que sentía aumentará. Volteó hacia el hombre que lo miraba, mirándole como si fuese el mismísimo diablo.
—¡Te voy a demandar viejo de mierda! —gritó con todo su enojo. —¡Si vuelves a acercarte a ella juro que te meteré a la cárcel hasta que no veas la puta luz del sol!
Con su poco saber en el español, le gritó todas esas cosas, dejando al más mayor atónito porque un tipo que no conocía le gritaba en su casa. Entre griteríos e insultos, la policía llegó para llevarse detenido a tu padre mientras que te tomaban declaraciones. Luego una demanda por parte de ambos para finalizar los trámites. Yoongi te tomo entre sus brazos, cargándotr hasta el vehículo para dirigirse al mejor hospital de todo el país. Finalmente te tenía con él, finalmente te sentías segura después de intensos y dolorosos días. Rompiste en llanto sin poder aguantar todo el dolor que cargabas dentro.
—Todo se acabó, amor, te prometo que ese miserable no se volverá a acercar a ti. —besó tu frente —Yo te cuidaré.
Estabas feliz de tener a Min Yoongi contigo.
espero que te haya gustado tanto como a mi ( ◜‿◝ )♡
