𝐒𝐄𝐌𝐏𝐈𝐓𝐄𝐑𝐍𝐎 | ❝ Eres la persona que le da sentido a mi eternidad ❞
Kailani Potter se muda al pueblo de Forks junto a su hermano con la idea de una vida tranquila y alejada del peligro. Lo que no imagino es que sería la compañera de un vampi...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
What if...? parte 2/3
Pido perdón si no se llega a entender del todo las fechas, siempre me termino enredando con eso.
Recuerden que esto es un universo alterno, aun queda una parte antes de seguir con la linea original. Habrán saltos en el tiempo, por eso las relaciones entre las parejas no se profundiza.
≪•◦ ❈ ◦•≫
En la habitación no se escuchaba más que a Escarbi tratando de robar la maleta dorada de Hermione.
—¿Regresar? —preguntó Harry.
—Piénselo, este pueblo no les trajo cosas buenas —hizo una mueca.— Después de todo lo que han pasado solo quiero que dejen de sufrir —dice casi en un susurro, le preocupaba que si esos vampiros volvían les siguieran haciendo daño.— Si quieren no vamos al mundo mágico... podemos viajar o ir a esa casa en el campo donde querían vivir.
Los mellizos de miraron por unos segundos, decidiendo con solo verse que harían.
Hermione no dijo nada mientras esperaba. Estaba acostumbrada a que ellos hicieran eso cuando debían escoger sobre algo.
—La casa de los abuelos suena como un buen lugar —le dijo Kaily a su hermano.
Harry sonrió levemente.— La casa con un gran jardín... como la que te prometí que tendríamos cuando éramos niños.
—Nos regresamos —hablaron juntos viendo a Hermione, quien sonrió enormemente y se lanzó a abrazarlos.
—¿Pero y la escuela? —la pelirroja hizo una mueca.— Serán meses de mi vida desperdiciados.
—Podemos venir por red flu y al acabar regresar —dijo Harry.— Solo estaríamos aquí por un par de horas.
≪•◦ ❈ ◦•≫
Harry le dio una barra de chocolate semi amargo a su hermana para tratar de bajar su enojo.
—Esos idiotas —mordió la barra aún molesta.— Limosna, eso es lo que mandaron ¡maldita limosna! —su cabello era más rojo de lo normal.— No lo necesitamos, somo ricos aunque no parezca.
—Ya ya —palmeó su cabeza.— Come el chocolate, si quieres después vamos por un pastel.
—¿De veras deveritas? —sonrió y su cabello volvió a su tono normal. Harry asintió.— ¡Gracias! —dio unos saltitos provocando que su hermano riera.
Ambos siguieron caminando hasta la casa de los Swan, querían saber como seguía Isabella y si a ella también le llegó dinero con la excusa de una beca.
