Mi pasión Prohibida

Capitulo 20 : La lucha entre las palabras enamoradas.

Pasaron varios días desde aquel fatídico día, donde todo se había puesto patas abajo, y para que negadlo, no sabía si esto era bueno o malo. Sasuke e itachi comenzaban a llevarse mejor, al principio su relación era bastante tirante , se notaba en el ambiente, sin embargo, cuando me quería dar cuenta ambos se habían marchado. ¿Para qué? Para hablar entre ellos, eran hermanos, y por lo tanto su confianza debía ser superior a la de los demás. Sin embargo, no sabía como tomarme eso, todo estaba avanzando muy deprisa, y tenía miedo, tenía miedo de imaginarme una utopía, que más tarde se acabaría rompiendo a cachos. Había tantos problemas en el ambiente, y como infinitas soluciones en un problema de matemáticas. Todo era tan complicado.

Era temprano por la mañana, y estaba desayunando con los pies encima de la mesa, esparramada con mi querido tazón de cereales, a mi lado, Naruto hacía lo mismo. Sin embargo, ninguno de los dos cruzábamos ninguna palabra ¿Porqué? Buena pregunta, nos quedábamos mirando la tele, como idos, sin nada que decir. Quizás... Quizás era por los problemas que rondaban en la villa.

Naruto no hablaba, porque volvía a estar preocupado por el tema de Hinata, y es que está, había renunciado a su clan, al derecho de ser la líder, y como consecuencia, su padre la había echado de casa. Y ahora dormía en la habitación de Naruto, pero eso no había acabado ahí. Aquel hombre, estaba haciendo todo lo posible porque a mi mejor amigo no le dejasen ascender a ambu. Danzou se había convertido en un problema que ayudaba.

Por consecuencias de la llegada de Akatsuki, Shikamaru no podía regresar a la arena, y esto comenzaba a irritarle. Realmente, nunca le había conocido enfadado, pero se asemejaba mucho, el estado en el que ahora se encontraba.

Noté como el chakra de itachi, bajaba las escaleras. Me giré en el sofá y le miré directamente, había bajado como cada mañana lo hacía en Aktsuki, solo con los pantalones. Era una manía de los Uchiha que realmente me comenzaba a enojar.

-Oye, itachi-sama, voy a ir a molestar a konan. ¿Te apetece venirte?- Me miró con sus ojos negros, y asintió levemente mientras se dirigía a la cocina, por la pequeña ventana le vi coger una manzana y subirse escaleras arriba. Deje el cuenco de los cereales en el fregadero. Y mi subí yo también para arriba, cuando llegué el ya estaba vestido, y me esperaba pacientemente. Sonreí. Y cogí mi ropa para meterme dentro del baño. ¿Qué había pasado entre itachi y yo en estos días? ... Era algo que tarde o temprano, acabaré contando, pero ahora mismo no era el momento. Por que... lo que había pasado entre nosotros... era un tema, que no quería recordar, a no ser que fuese totalmente necesario.

Salimos los dos, con la ropa de jounnin que nos habían dado, puesto que al aceptar akatsuki el pacto, se habían convertido en el rango que poseían en nuestra villa por lo tanto, todos menos Itachi, era gennin. A este le correspondía el grado Ambu, pero aun no se lo querían dar, por lo tanto se había quedado en jounnin, como ahora mismo estábamos nosotros. Al parecer, y a mi semejanza. Tsunade quería al Uchiha en el equipo, pero no le quería dar la confianza que nos daba a nosotros. Era un traidor, y ella quería comprobar hasta que punto lo era.

Avanzamos hasta la calle sin decir ninguna palabra, y al girar la esquina justo de donde estaba Akatsuki, note como una mujer de pelo azul se tiraba corriendo brutalmente contra mí. Las dos acabamos en el suelo, con la delicadeza de que uso su justu, para que la caída fuese completamente indolora.