Mi pasión Prohibida

Capítulo 3 : Nuevas vidas que exigen un futuro

Capítulo 3 : nuevas vidas que exigen un futuro.

 

Cerré el puño con furia, para volver a abrirlo de nuevo, me fije en el aparatito que tenia en la mano. No podía ser... No podía ser... Suspire y volví a cerrar el puño. Mire mi cara en el reflejo del espejo, mis ojos verdes estaban abiertos como platos, las ojeras debajo de mis ojos marcaban los días que había estado sin dormir por este motivo, mi boca convertida en una fina linea, dejaba claro que no estaba feliz con lo que había sucedido.

Habia recordado con plenitud el día en el que fui secuestrada por Akatsuki. El dia en el que itachi, me trajo a las paredes que comprendian esta organización. El día en el que cambio mi vida de arriba a abajo. Suspire de nuevo. Habia cometido un gran error quedandome aqui, principalmente, por que uno de los mayores errores comenzaba a crecer en mi vientre. Suspire... Habia metido la pata hasta el corvejón.

Mire de nuevo mi cara en el reflejo y esta no habia cambiado nada. Suspire cansada y mire mi mano, para observar el predictor que entre mis dedos escondia. Positivo.

Había cometido muchos errores desde aquel día en aquel lugar, y en aquella batalla. Comenzando por perderla, y siguiendo por él... Itachi Uchiha.

Después de todo aquello, de secuestrarme contra mi voluntad y hacerme cómplice de sus actos delictivos en Akatsuki, me comencé a acostumbrar a él. Pues sus ojos negros como pozos, no escondían la maldad que aparentaban, y su frialdad, característica de él. Ardía con el fuego de la noche cada vez que entre sus brazos me escondía. Nunca había estado mas segura, nunca había sido tan feliz, y a la vez tan desdichada. Había cometido el error de enamorarme de Itachi uchiha.

Me encantaría por supuesto, contar como fue, como sucedió todo. pero... Contar cosas desagradables no es lo mio. Y menos cuando un pequeño ser, se esta formando dentro mía. Naruto, Sasuke... Me encantaría saber como contaros todo esto sin que me juzguéis por ello.

Escuche los pasos de itachi en la habitación, pero no me inmute por ello, y seguí mirándome en el espejo. Recordaba el porque me había enamorado de él... claro que lo recordaba. Nunca había visto tanta ternura en una fachada tan diabólica, tanto cariño cuando necesitaba recibirlo, tanta comprensión.. tanta como nunca nadie me había ofrecido. Era todo lo contrario a lo que parecía, y le amaba por ello. Sin embargo, sabia que era un error enamorarse de él, un error y muy grave, porque yo era fiel a mis amigos, a mi ciudad, a mi tierra. A todo aquello con lo que crecí desde pequeña, hasta convertirme en la mujer que soy ahora.

Mire con detenimiento el predictor, he hice lo que llevaba tiempo queriendo hacer. Cerré el puño con fuerza y lo rompí, convirtiéndolo en cachitos pequeñitos. Mire otra vez mi reflejo en el espejo de cuerpo entero, y por un momento, me imagine a mi misma con un pequeño bulto en mi vientre. Sin tener conciencia de ello, pasaron por mi cabeza miles de momento que podía vivir con mi hijo, con el pequeño ser que crecía dentro de mi. Ahora consideraba que no era un error tenerle. Era un error haberle concebido con él. ¿Cómo explicar a tus amigos, que el hijo que esperas es del hombre que traiciono konoha? Buena pregunta.

Me deshice del apartito tirando los restos casi ilegibles a la basura, me lave la cara con agua recién salida del grifo, y salí del baño. Encontrándome cara a cara con él, él dueño de mi desdicha, y el causante de una felicidad cautivadora. Le mire directamente a los ojos, él me devolvió la mirada.

-¿Algún problema?- me pregunto con su voz fría, y su rostro sereno, tal y como lo solía hacer siempre.

-Ninguno- conteste. Me deslice y pase por su lado. fui hasta el armario y le abrí .Mire la ropa que tenia, poca, pero suficiente. Iba con asesinos, no con modelos. Cogí mi ropa interior, mis mayas negras y una camiseta de mismo color, me quite la toalla que crubria mi cuerpo ante la atenta mirada de itachi. Este miraba como me movía, solía hacerlo siempre. Acabe de vestirme, y el seguía mirándome, emito un ligero sonido, y se acerco a mi.