36: Las Reliquias de la Muerte

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En cuanto entramos en todas partes había flores, insectos y pájaros pintados con intensos colores primarios, era mucho más colorido que mi estilo

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En cuanto entramos en todas partes había flores, insectos y pájaros pintados con intensos colores primarios, era mucho más colorido que mi estilo...o el de cualquiera. Aún así no me fijé mucho en la decoración y en los muebles si no que estaba buscando a Luna. Mi mirada pasando por cada pequeño y gran rincón y me sentí decepcionada al no verla.

— Será mejor que subamos —propuso Xenophilius, aún incómodo, y nos guio por la escalera.

La habitación del piso superior era una combinación de salón y taller, todavía más atestada de cosas que la cocina. De seguro mi habitación se aparecería de no ser que mi abuela Tina me obligaba a limpiar mi cuarto. Sentí un dejo de pena al pensar en mis abuelos y en el peligro en el que yo los había metido. Pero Luna no estaba allí y lo que hacía ruido era un artilugio de madera repleto  de engranajes y ruedas que giraban mediante magia; no paraba de escupir ejemplares de El Quisquilloso.

— Discúlpenme —dijo Xenophilius y se acercó a la máquina cubriendo  la prensa, con lo que los fuertes golpes y traqueteos se amortiguaron un poco. Entonces miró a Harry y preguntó—. ¿A qué han venido?

Pero, antes de que el chico contestara, Hermione dio un gritito de asombro e inquirió:

—¿Qué es eso, señor Lovegood?

Señalaba un enorme cuerno gris en forma de espiral, similar a un cuerno de unicornio, que estaba colgado en la pared y sobresalía varios palmos hacia el centro de la habitación. Inmediatamente lo reconocí, había puesto tanta atención en solo encontrar a Luna que no me fijé bien en el resto de la casa.

— Es un cuerno de snorkack de cuernos arrugados —contestó Xenophilius.

— ¡No puede ser! —exclamó Hermione.

— Hermione —masculló Harry—, creo que no es momento de...

— Eso no es un cuerno de snorkack arrugado— reí como si fuera lo más estúpido del mundo—. Es un un cuerno de erumpent. Y peligroso en casa por cierto.

— ¿Cómo sabes que es eso? —preguntó Ron, apartándose del cuerno tan deprisa como le permitió el desmedido revoltijo de cosas que había en la habitación.

— ¡Está descrito en solo el mejor libro que hay: Animales fantásticos y dónde encontrarlos!— lo vi enojada de que no supiera de corazon el mejor libro del mundo como yo. No me gustaba leer en general, sin embargo el libro de mi abuelo Newt me lo sabia al derecho y al revés.

— Señor Lovegood, tiene que deshacerse de ese cuerno enseguida,— Hermione afirmó preocupada—. ¿No sabe que puede explotar al menor roce?

— El snorkack de cuernos arrugados —dijo Xenophilius con claridad y testarudez— es una criatura tímida y sumamente mágica, y sus cuernos...

— Señor Lovegood, esos surcos que hay alrededor de la base son inconfundibles.— lo interrumpí sintiéndome levemente ofendida que a mi, Laila Scamander bisnieta de Newt Scamander me estuvieran hablando en un tono condescendiente en cuanto a criaturas fantásticas.

Laila Scamander Y Las Reliquias De La MuerteWhere stories live. Discover now