𝓣𝓸𝓰𝓮𝓽𝓱𝓮𝓻 𝓾𝓷𝓽𝓲𝓵 𝓽𝓱𝓮 𝓫𝓲𝓽𝓽𝓮𝓻 𝓮𝓷𝓭 ♡𝓠𝓲𝓷 𝓢𝓱𝓲 𝓗𝓾𝓪𝓷𝓰

~❤️ 19~

-¿Sabes cuál era el nombre del hombre qu- el hombre fue abruptamente interrumpido.

-Xu Jin- Shui no le dio la oportunidad de terminar su pregunta, sabía claramente a quien se refería, no quería escuchar salir de sus labios algo relacionado a dicho hombre. Respondió en seco e inexpresiva, ni siquiera le dirigió la mirada.

Qin suspiró, "No va a ser fácil." Pensó para sí.

-¿Deseas que tenga un castigo en específico? - estaba dispuesto a hacer todo lo que Shui le pidiera, sin importar lo sádico qué pudiese llegar a ser.

-No quiero saber nada de él... - Le enojaba sentirse tan vulnerable cuando se tocaba ese tema. Más que tristeza lo que se evocaba dentro de ella era ira. Mordió el interior de sus labios con fuerza para reprimirla lo más posible.

"Cuando te miro a los ojos, y... cuando pienso en ese día me siento tan culpable por lo que paso... Aún que lo que me sucedió no haya sido mi culpa... siendo hundir mi alma en la oscuridad. Si sigo pensado en ese día no seré capaz de ser plenamente feliz, tan solo quiero enterrar ese día en lo mas profundo de mi ser."

-Tus ojos se ven tan lindos cuando la luna los ilumina...- la voz de Shui era suave y melancólica.

Qin Shi Huang se puedo frente a ella y la tomó de las manos.

-¿Sabes que es lo que yo veo cuando te miro a los ojos?

-No.

-Veo a la mujer con la que quiero pasar el resto de la eternidad.

"Por favor, no digas eso... Ni siquiera puedo mirarte a los ojos sin sentirme sucia." pensó Shui para sí misma, en definitiva, revivir ese día la hacia sentir peor.

Qin no paso desapercibidos los sentimientos de su joven prometida.

-¿No te arrepientes de hab- La mujer estaba por preguntarle algo, pero el hombre ni siquiera la dejó finalizar su oración. Calló su voz con un dulce beso.

-Un rey no duda, y estoy completamente seguro y sin lugar a dudas de estar perdidamente enamorado de la mujer frente a mí. No me arrepiento de nada con respecto a ti.-Qin la abrazó fuertemente con el debido cuidado de no dañarla con su fuerza sobrehumana.

Shui correspondió su abrazo y dejo reposar su rostro sobre el hombro de su amado.

-Si tu me lo permites puedo borrar toda mala sensación que ese maldito hijo de perra te haya dejado sobre tu piel.- habló tan tranquilo que hasta las palabras altisonantes no sonaban propias de ese tono de voz.

-¿Y cómo harías es...- Shui calló en cuenta a lo que se podía estar refiriendo Qin, por lo que sus mejillas se sonrojaron intensamente.

Qin se rio con suavidad y diversión, le gusta ver a su futura mujer así de nerviosa.

-Pero en verdad, ¿hay algo que yo pueda hacer por ti para que te sientas mejor, linda?- volvió a tomar compostura.

-No lo sé... Solo no quiero sentirme así...

-Cierto, olvidé comentarte algo.

Durante su largo día, Qin habia estado pensado en algo. Se trataba sobre darle el título de emperatriz a Shui, no el título de emperatriz consorte, no deseaba que su pueblo la vieran como un adorno, le daría un título a su nivel, pero no de forma imprudente y sin que Shui no tuviesen conocimientos sobre todo lo correspondiente a un rey.

-¿Te gustaría formar parte de mi corte? Ninguna mujer ha tenido un cargo importante dentro de la política de nuestro país, ni siquiera para formar parte la corte del rey, me encantaría que fueras la primera en tenerlo.- la mujer quedó confundida, jamás había pensado en formar parte de eso.