~❤️ 22~

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Faltaba tan solo una noche para la boda, por la mañana comenzaría todo.

Shui yacía en su cama ansiosa, no sabía cómo sentirce con respecto a todo, le ponía eufórica el poder casarse con un hombre que la amaba tanto como ella lo amaba a él, no obstante aún no se sentía suficiente como para convertirse en la consorte de una persona tan importante como lo era Qin Shi Huang.

La mujer prefería dejar su estrés para la mañana, estaba por comenzar a dormir, su corazón latía de emoción y esperanza, pues apesar de que su hermana no había respondido su pergamino aún, cabía la posibilidad de que llegara por la mañana. Decidió ir a dormir con esa mentalidad.

[...]

-N-no n-no me s-siento lista.- susurró mientras tartamudeaba de los nervios. Sus manos le temblaban y la cabeza comenzaba a dolerle.
Se miró en un espejo y aún no se lo podia creer. Vestía con un hermoso vestido color rojo, con tocados de oro y ciertos detalles con piedras preciosas de todo tipo de tonalidades de colores, su cabellera estaba decorada por bellas horquillas de oro puro. Sin duda se veía hermosa.

-Todo saldrá perfecto señorita, ya lo verá- exclamó tranquila Fǎn Shì.

Shui pensaba en su hermana Size, la cual finalmente nunca respondió su mensaje y mucho me nos llego al palacio. Le preocupaba que no le hubiese llegado y que ella ni siquiera estuviese enterada de su invitación.

Los nervios la consumían gradualmente, no solo le inquietaba no tener cerca a su hermana, ni ella misma sabia lo nerviosa que le ponía el casarse con un emperador, apesar de conocerlo mejor que nadie, el peso de su título también lo sentía sobre sus hombros, todo tenía que salir perfecto.
Al amanecer comenzo todo el proceso de la boda, se llevaban a cabo cierto tipo de tradiciones y rituales antes de ir directamente al templo dónde se uniría en matrimonio con el amor de su vida. Lo mismo aplicaba para el emperador Qin Shi Huang, la diferencia entre los dos era que Qin no se encontraba nervioso, él estaba completamente emocionado.

[...]

Qin Shi Huang fue el primero en llegar al templo, vestía acorde a la celebracion y casi por completo de color rojo, se le veía desde lo lejos alegre y emocionado; lucía simplemente perfecto a los ojos de cualquiera.
Posterior a él llegó Shui. El rostro de la mujer era cubierto por un presioso y fino velo color carmín. El hombre la vio llegar desde el templo, a sus ojos la mujer se veia más que hermosa, decidió retirar la venda de sus ojos en momentos como ese durante el día.

El hombre al estar prácticamente a su lado pudo notar lo nerviosa que ella estaba, así que la tomó de la mano tratando de calmar sus nervios. Shui lo miró atravez de su velo y le sonrió torpemente y poco después entraron por completo al templo.

La ceremonia dio inicio, Shui pese a que había practicado un sin fin de veces todo lo que haría y diría durante la ceremonia terminó cometiendo pequeños errores un par de veces, a ella le apenaba mucho su desempeño, pero a Qin lejos de molestarle le parecía tierno.
Para reconfortar un poco a su amada Qin se salió del protocolo en un par de ocasiones para guiarla y que ella se sintiera más cómoda.

-Lo haces bien, calma. Solo dejate llevar.- le susurró Qin en voz baja una vez que tuvo oportunidad.
Ella asintió nerviosa mientras estaba en proceso de regular su respiración.

La ceremonia estaba en su punto medio, Shui poco a poco abandonaba sus nervios y miedos, comenzaba a sentirse bastante agradecida pues ya estaba casi a punto de unirse en matrimonio con el amor de su vida.
La joven mujer veía de reojo a su amado atravez del velo y sonreía bobamente, no se arrepentía en lo mas mínimo de estar unida por el resto de la eternidad con el hombre al que conoció en un principio como Ying Zheng y al que ahora también conocía como Qin Shi Huang.

𝓣𝓸𝓰𝓮𝓽𝓱𝓮𝓻 𝓾𝓷𝓽𝓲𝓵 𝓽𝓱𝓮 𝓫𝓲𝓽𝓽𝓮𝓻 𝓮𝓷𝓭 ♡𝓠𝓲𝓷 𝓢𝓱𝓲 𝓗𝓾𝓪𝓷𝓰Where stories live. Discover now