La fiesta del río era muy popular en Valedai. Se congregaba mucha gente para disfrutar de los días junto al agua. Había cantantes, puestos de comida y diferentes actividades y shows para entretener a las personas.
Si mis alumnos no me recordaban el evento, lo iba a olvidar por completo. Tenía la cabeza muy concentrada en las clases y las planificaciones.
A la salida, aproveché para parar en una tienda de ropa a comprarme un vestido. Si iría a la fiesta, necesitaba ropa. Hacia bastante tiempo que no actualizaba mi armario.
—¡Buenas tardes! –me saludó alegre la mujer que atendía.
—Buenas tardes.
—¿Qué tal el día en la escuela? —preguntó al verme con el delantal.
—Muy lindo, los niños se han portado muy bien.
—¿Gregorio también? Últimamente en casa está muy rebelde.
Reí.
—Tiene sus momentos, pero ahora lo noto mas tranquilo. Está cumpliendo muy bien con sus tareas.
—Me alegra oírlo. A veces me preocupo demasiado.
—Es normal. Pero por ahora va muy bien.
—Me alegro, me alegro. ¿Qué estabas buscando?
—Un vestido. Como para la tarde.
La mujer me guio hacia un perchero de la tienda y me dejó para que mire las opciones con tranquilidad.
Y justo en ese momento, la cortina de uno de los probadores se abrió y de allí salió quien menos pensaba.
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Corazón de hojas (Amor de estaciones #2)
Short StoryUn joven arma su mochila y sale de su pueblo con destino a todas partes. Su único objetivo es recorrer el mundo. Una joven de la gran ciudad está viviendo su sueño de ser maestra. En esos años son muy pocas las mujeres que logran tal independencia...
