68 - Ella

0 0 0
                                    

Me acompañó a mí casa.

La noche estaba fría.

Caminamos de la mano.

Intenté mirarlo muchas veces en ese trayecto porque sabía que sería la última vez.

La última vez

Mí corazón se estrujaba cada vez que hacía consciente aquel detalle devastador.

Nuestras miradas coincidieron y nos sonreímos.

—Ven conmigo —me dijo de pronto, frenando mis pasos a una cuadra de mí casa.

—¿Qué dices?

—Ven conmigo. Viajemos juntos. Quiero que me acompañes.

Aquello me tomó de sorpresa. Había imaginado muchas posibilidades para que lo nuestro continuara, pero aquello no había estado en mis opciones.

—Waldo, yo

—No. No me respondas ahora. Tienes toda la noche para pensarlo, yo te estaré esperando en la estación. El tren sale a las 8. Si quieres ir, ahí estaré. Y si no, lo entenderé.

Suspiré. No sabía que hacer ni que decirle.

—Escucha, está experiencia que vivimos juntos fue la mejor de todo el viaje desde que inicié en pleno verano. No recuerdo haber sido tan feliz en el último tiempo como lo he sido estas semanas contigo. Me has regalado los mejores días me atrevo a decir, de mí vida. Realmente, Griselda, es increíble lo que siento por ti.

Quise llorar ante aquellas palabras. Pero me negué, quería poder despedirme bien.

—Waldo, la que tiene que agradecerte por lo vivido soy yo. Has llegado para romper cada una de mis estructuras y me has llevado a un universo que jamás creí conocer. Gracias a ti mí vida se llenó de experiencias y de un latir muy bonito. Te quiero y quiero mucho esto que formamos juntos.

Me envolvió en un abrazo que me impidió terminar de hablar y logró que las lágrimas que estaba reteniendo se soltaran fuera de mí control.

—Hemos vivido algo hermoso juntos y me gustaría mucho poder seguir sumando experiencias contigo. Se que es una locura, pero decidas lo que decidas hacer, me llevo un recuerdo hermoso de ti y de nosotros.

—Te quiero mucho —fue lo único que pude decir.

Estuvimos varios minutos abrazados hasta que pude calmarme. Entonces nos separamos y nos observamos en silencio, guardándonos en la memoria.

Y finalmente, nos besamos.

Por última vez.

Y lo vi partir.

Y volví a llorar.

Corazón de hojas (Amor de estaciones #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora