𝕌𝕟𝕔𝕒𝕟𝕟𝕪 /𝕁𝕒𝕤𝕡𝕖𝕣 ℍ𝕒𝕝𝕖

◈Capítulo 10◈

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Decepción.

Eso fue lo que Lucy sintió cuando Alice no llegó a su clase de literatura, porque por consecuencia, Jasper tampoco fue. Desde su llegada a Forks, los Cullen nunca habían faltado, una pena que lo hicieran justo en el primer día soleado que Lucy vivía en ese pueblo.

La pelirroja tenía un puchero muy adorable en su rostro mientras observaba a los estudiantes jugar a su alrededor. Prácticamente contó las horas para volver a ver a Jasper.

—No están aquí— mencionó Jessica, estirada en la mesa donde disfrutaba del radiante sol.

—Creo que ya lo notamos— murmuró Lucy apoyando su cabeza en el hombro de su hermana.

—Cuando hay buen clima los Cullen desaparecen…— explicó. Cielos, ella sabía todo de esa familia.

—¿Y no van a la escuela?— preguntó Bella desconcertada.

—No. El doctor Cullen y su señora los llevan a acampar. Intenté eso con mis padres y no funcionó— Jessica se quejó ante el recuerdo de su inútil intento de adoptar las mismas "costumbres" que los Cullen.

—Creo que papá tampoco aceptaría— bromeó Lucy empujando el hombro de Bella, recibiendo un asentimiento de cabeza.

—¡Chicas!— Una entusiasmada Ángela llegó a la mesa. —Voy a ir al baile con Eric. ¡Yo lo invité y dijo que sí!— contó apenas conteniendo la emoción y moviendo sus delgados brazos.

—¡Te lo dije!— felicitó Bella, abrazando a la de anteojos.

—¡El futuro es femenino!— exclamó Lucy levantando sus manos al aire y apretando a Ángela en un emocionado abrazo.

—¿De verdad tienen que salir de la ciudad?— preguntó la misma, mirando a las mellizas con una mueca.

—Ese era el plan pero… también me invitaron, así que…quizás yo si asistiré— dijo la pelirroja con sus mejillas sonrojadas.

—¿Y quién te invitó?— preguntó Jessica con una gran sonrisa, demasiado expresiva y tensa para ser real.

—Jasper la invitó— contó Bella sonriendo con orgullo antes de que Lucy pudiera responder.

—Si, lo que Bella dijo— rió la pelirroja.

—No puede ser…¡no puede ser, eso es increíble!— chilló Ángela, completamente emocionada por su amiga.

—Okay, hay que ir de compras a Port Angeles, porque si no, se acaban los vestidos— Jessica mencionó. El timbre que anunciaba la siguiente clase obligó a las chicas a separarse de su abrazo.

Por primera vez desde que pisaron la secundaria Forks, algo que dijo Jessica Stanley llamó completamente la atención de las mellizas.

—¿A Port Angeles?— preguntó Lucy con los ojos brillantes. Casualmente, necesitaban ir allí.

—¿Podemos ir?— preguntó Bella, pensando en lo mismo que su hermana.

—¡Claro! Quiero sus opiniones— aceptó Ángela con entusiasmo antes de enganchar su brazo al de Lucy.

—¡Genial!— sonrió la pelirroja. —¿Qué les parece una cena en algún restaurante, después de que escojan sus vestidos?— preguntó mirando a su melliza y a sus amigas.

—Es una gran idea— aceptó Jessica. —¿Cómo que "sus" vestidos?, ¿Tú no comprarás uno?— preguntó luego de analizar las palabras de Lucy.

—No lo creo. Ya me comprometí con otra persona para escogerlo— se encogió de hombros con una sonrisa apenada.