ʙᴇꜱᴛ ʏᴇᴀʀꜱ | ʙʀɪᴀɴ ᴏ'ᴄᴏɴɴᴇʀ

Capítulo 8 🏎️

Narrador omnisciente:

Mia esta sentada frente al computador con un walkie talkie en mano dispuesta a darles las instrucciones a Dominic y Brian para que saquen la caja fuerte de la estación de policía.

Clarissa esta con un uniforme de policía en un auto policial esperando las instrucciones de Mia, pues sería una de las que ayudarían a ganar tiempo luego del robo.

La pelinegra sonríe levemente recordando todos los consejos y advertencias de Brian para que se cuidara, no estaba de acuerdo con que ella participara pero no podía prohibírselo.

—Guíanos, Mia —le pide Dom una vez que tienen la caja fuerte.

—Sigue de frente dos manzanas —responde ella mirando la computadora—. Derecha.

—Entendido —afirma Brian.

Giran a la derecha con rapidez logrando que la caja fuerte deje marcas en el suelo y choque con algunas cosas, todas las personas que andan en la calle corren a esconderse mientras las patrullas salen buscándolos.

—Bueno, el plan está funcionando. Tienen a todos los policías corruptos de Río siguiéndolos —informa Mia—. Deben moverse rápido.

—¿La mejor ruta? —pregunta Brian.

—Sigan de frente a otros 800 metros hasta Rua Fonseca y luego a la izquierda.

Los dos conductores se disponen a seguir sus instrucciones tratando de no causar tanto desastre ni lastimar a alguien en el proceso, pues la caja que van tirando se mueve para todos lados en las calles.

—Eso no funcionará —dice Dom al ver los policías.

En vez de doblas a la izquierda doblan a la derecha causando un gran desastre, la gran caja fuerte rompe los ventanales de un banco debido al brusco giro pero Dominic y Brian no se detienen.

—Escucho reportes en la radio —Mia frunce el ceño—. ¿Atravesaron un banco?

Clarissa murmura una maldición al escuchar eso y espera que no hayan herido a nadie accidentalmente. Los chicos siguen huyendo de la policía tratando de superar los obstáculos que estos les ponen.

—Por el sur se acerca un grupo grande —informa Mia—. ¡Tienen que hacer algo ahora!

Dominic y Brian se encargan de derribar las patrullas policiales son perder su marcha, mientras los transeúntes observan la escena con asombro y miedo. Las patrullas parecen multiplicarse ya que cada vez aparecen más.

—Nosotros nos encargamos —dice Clarissa cuando escuchan más disparos.

Clarissa, Roman y Han aparecen en la escena conduciendo las patrullas policiales con el objetivo de sacar a los policías corruptos de la persecución. Una carcajada brota de la garganta de la pelinegra cuando choca otra patrulla por detrás.

Clary se encarga de librarlos de los policías que van en la izquierda mientras Han y Roman se encargan del lado derecho.

—Gracias, chicos —agradece Dom—. Gracias, Clary.

—No fue nada, lo hago por diversión —ríe la chica.

—Cuando quieras —sonríe Han.

—Los veré del otro lado —finaliza Roman.

—Acaban de ganar 10 segundos —les dice Nicholas, esta junto a Mia—. No los desperdicien.

Más adelante tenían el puente donde debían hacer el intercambio de la caja fuerte, solo tenían una oportunidad por lo que debían estar concentrados. Segundos después todo parecía bien, pero las patrullas y los hombres de Reyes se acercan a ellos con rapidez.