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Lucero en España y Enzo en Lisboa, luego de su última salida no se habían comunicado, ni tenido algún acercamiento alguno.
Enzo por su parte, nunca dejó de pensar en Lucero, esa rubia para el se había metido en su cabeza y tenía estadía para rato. Pero por otra parte había conocido a Valentina, quién a duras penas se había convertido en su novia. El no quería ser malo, el no quería utilizar a Valentina para poder olvidarse de Lucero, pero es lo único que estaba logrando. Porque a Valentina no la ama, ni la amo, tampoco está enamorado de ella, ni siente atracción alguna hacía aquella morocha.
Se preguntarán porque está con ella si de en verdad no la ama?, la respuesta es está:
Lucero, paseando por las calles de la capital española, es decir, Madrid, se encontró con su actual pareja Jordi Pujol. Digamos que fue un amor a primera vista por parte de Jordi, quién se empeño en que la rubia sea de el y lo logró porque Lucero acepto ser su pareja, con una idea, poder olvidarse de Enzo.
Esa parte Enzo no la conocía y cuando se enteró que la que creyó el era, el amor de su vida, tenía novio su mundo se derrumbó y ahí encontró a Valentina, en una de esas tantas noches que salía para olvidar.
Ambos estaban con sus parejas por un solo motivo, olvidar, pero con lo que ellos no cuentan es con su corazón. Éstos están dedicados al otro, mutuamente y no piensan moverse de ahí.
Julián, quién conoce las dos posturas se quería matar, tanto le había costado poder emplear su plan de que sus mejores amigos sean pareja y cuando estuvo tan cerca de lograrlo, pasan estás cosas y Julián ya no sabía que hacer.
Lucero con su pareja estaba incómoda, ella creía que el privatizaba su libertad es decir, cada vez que estaban juntos y a ella se le ocurría alguna de esas locuras que se pasan por la mente, el la obligaba a que se comporte como una dama y no una adolescente, cosa que a Lucero no le gustaba para nada. Y si a ella de por si no le gustaba, a sus cercanos, mejor, ni les cuento.
Por su parte, Enzo, estaba irritado, Valentina ers insoportable y recién iban semanas de “novios”. A ella siempre le había gustado esa vida de lujos, poder tenerlo todo y ahora que lo consiguió no lo iba a soltar tan fácil.
Lucero se devastó cuando se enteró de la reciente pareja de Enzo, pero no podía hacer nada, al fin y al cabo, ella también estaba en pareja. Así que no le quedó de otra que fingir demencia y enfocarse en una sola cosa, Élite.
Siendo sincera, Lucero, siempre que podía se escondía y miraba los partidos de Enzo, estaba orgullosa de lo que estaba logrando y lo único que se preguntaba era:
Porque no se nos dió como nosotros queríamos?, porque estando tan cerca de haber sido lo que tanto quería nos alejamos?
Tal vez no eras el amor para mi vida, pero si, el amor de mi vida. Pensaba Lucero.
Por su parte, Julián debía hacer algo. El estaba seguro que ninguno estaba con sus parejas por amor, estaba seguro que aún había una chispa y que el debía colaborar...pero, como hacía cuando uno vivía en Portugal, la otra en España, y para colmo, el vivía en Reino Unido.
Hablando con su novia llegaron a un acuerdo, en menos de un mes sería el Mundial y esa era la única oportunidad de que se vuelvan a reencontrar...
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